El calor generado por cualquier dispositivo o circuito electrónico ha de ser disipado para mejorar su fiabilidad y prevenir un fallo permanente e irreversible. Ya en los 2000 los procesadores comenzaron a aumentar exponencialmente su potencia y, por ende, el calor disipado. La bajada de nanometros de la fabricación FinFET iba ayudando, peor no era […]