Los pescadores dicen que encontrar una langosta azul en el mar es señal de buena suerte. Hacen esta afirmación porque se calcula que hay una probabilidad de hacerlo de 1 entre 2 millones. Eso no quiere decir que sea la proporción real en la naturaleza, pero sí la que se ha calculado con base en las capturas. Sea cual sea la cifra exacta, está claro que hallar una langosta azul es bastante peculiar. Pero lo es todavía más si es una langosta mitad azul, mitad marrón. E increíblemente más si también es mitad macho, mitad hembra. Esto puede parecer imposible, pero no lo es. Se trata del caso de Bowie, una langosta que ha sido capturada recientemente en el Atlántico Norte y que ya se está haciendo famosa en TikTok.
Bowie cayó en las redes de un pescador amigo de un famoso tiktoker e instagramer llamado Jacob Knowles, por lo que ha tenido muy fácil su ascenso a la fama. De hecho, el nombre se lo han puesto sus seguidores, en honor a David Bowie, el famoso cantante que supuestamente tenía un ojo de cada color. Supuestamente, porque lo que le pasó en realidad es que, por un golpe en el ojo, se le dañaron los músculos que contraen la pupila, de manera que tenía una mucho más pequeña que la otra, dando la apariencia de portar distintos colores. Pero eso no es lo que nos interesa ahora.
El famoso, en este caso, es Bowie, la langosta mitad azul, mitad marrón, mitad macho, mitad hembra. Es la primera de este tipo que se encuentra, pero en realidad la explicación de lo que le ocurre podría explicarse con tres fenómenos: el ginandromorfismo, el quimerismo y la rara mutación por la que hay tan pocas langostas azules.
¿Qué es el ginandromorfismo?
El ginandromorfismo es el fenómeno por el cual un organismo puede tener características tanto masculinas como femeninas. Ocurre sobre todo en insectos, pero se han documentado casos en aves y crustáceos, como esta langosta mitad azul, mitad marrón.
Es mitad macho, mitad hembra, por un fallo en la división celular que ocurre durante el desarrollo embrionario.
Como ya sabemos, el sexo biológico lo suele indicar la conformación de los cromosomas sexuales. En cada especie estos pueden llamarse de formas distintas, pero vamos a verlo con los cromosomas X e Y, como se llaman en humanos y otras muchas especies.
Los machos tienen la conformación XY, mientras que las hembras tienen XX. Cuando una célula se divide, primero debe duplicar sus cromosomas, incluidos los sexuales. Así, si tenía cromosomas XY, pasará a tener XXYY. Cuando esta célula con los cromosomas duplicados se divide, pasará a formar dos células XY. Sin embargo, en algunos casos puede darse un fallo en el desarrollo embrionario, por el cual la división no ocurre exactamente a la mitad. Es decir, en vez de dos células XY, tendremos una X y otra XYY. Esto, a efectos visibles, se traduce en caracteres masculinos y femeninos. Por eso, cuando el individuo termine su desarrollo embrionario y llegue a adulto, podría ser mitad macho, mitad hembra, biológicamente hablando.
Una langosta mitad azul mitad marrón: ¿a qué se debe?
Generalmente, las langostas tienen un color similar al marrón. Esto se debe a que tanto su carne como su caparazón reciben el color de un pigmento llamado astaxantina. Es un pigmento muy curioso, pues su color depende de su conformación.
En la carne de los crustáceos, está libre, de manera que se ve de color rojo. Sin embargo, en el caparazón interacciona con proteínas que lo contraen, dándole diferentes tonalidades. Ante un primer doblez, se torna de color azul. Sin embargo, en la capa más externa del caparazón se pliega dos veces, adquiriendo un color amarillo. La mezcla de rojo, azul y amarillo es la que da a las langostas sus característico color marrón.
Sin embargo, en algunos casos puede haber una mutación por la cual predomina el plegado que le da ese color azul. Es lo que le ocurre a Bowie, aunque probablemente el suyo también sea un caso de quimerismo. Este se da cuando dos zigotos (dos óvulos fecundados por dos espermatozoides) se fusionan, mezclando sus dotaciones genéticas. El resultado es un solo individuo con células pertenecientes a dos genomas distintos. Posiblemente este sea el caso de la langosta mitad azul, mitad marrón. Tiene células de un individuo mutado y otro sin mutar.
Todo esto hace a Bowie un animal muy especial. Todo lo raro converge en él. ¿Habrá más cómo él en el mar? Quizás sí. Pero, siendo sinceros, ojalá nunca los pesque nadie. Mucho mejor para ellos.