Microsoft ha anunciado el fichaje de Sam Altman, cofundador y, hasta el viernes, CEO de OpenAI. La compañía también ha sumado a sus filas a Greg Brockman, cofundador y expresidente de OpenAI, quien abandonó la empresa tras lo sucedido la pasada semana.
“Estamos extremadamente emocionados de compartir la noticia de que Sam Altman y Greg Brockman, junto a otros compañeros, se unen a Microsoft para liderar un nuevo equipo de investigación en inteligencia artificial avanzada”, anunció Satya Nadella, CEO de Microsoft, a través de su perfil oficial en X (Twitter).
La contratación de Sam Altman por parte de Microsoft supone un nuevo giro de guion en esta historia. Tras el inesperado despido, la junta de OpenAI fue presionada para revertir sus actos y devolver a Altman al cargo. Dichas presiones, según diversos medios, procedían tanto de inversores como de empleados, que amenazaron con dimitir masivamente si no ocurría lo contrario.
Microsoft se lleva a Sam Altman pero mantendrá una estrecha relación con OpenAI
En enero de 2023, Microsoft anunció una inversión multimillonaria en OpenAI, elevando su participación en la misma y asentándose como uno de sus grandes inversores. Desde entonces, ambas empresas han trabajado de muy de cerca. Prueba de ello es Bing Chat –ahora denominado Copilot– o las diversas funciones basadas en IA que han sido implementadas a lo largo de los últimos meses en Windows, Office, etc. Todas ellas dependen en mayor o menor medida de los modelos desarrollados por OpenAI.
Esta estrecha relación, al menos por el momento, continuará a pesar de la salida de Sam Altman, según ha anunciado Satya Nadella en su perfil oficial de X (Twitter). El ejecutivo aprovechó su comunicado para dar la bienvenida al nuevo CEO de la corporación, quien, hasta marzo de este mismo año, lideró Twitch. Por lo tanto, es posible que, en un futuro cercano, veamos nuevas funciones en los servicios de Microsoft basadas en la tecnología de OpenAI.
No obstante, si Microsoft ha creado un nuevo grupo de desarrollo de inteligencia artificial avanzada –con Altman al frente–, parece cuestión de tiempo que los lazos entre la empresa norteamericana y la startup de IA se reduzcan, a pesar de la gran apuesta que el gigante hizo en la misma meses atrás.
Microsoft quiso que Altman volviera a su puesto
Microsoft no contaba con un asiento en la junta directiva de OpenAI, a pesar de ser uno de los grandes inversores en su subsidiaria con ánimo de lucro. Por lo tanto, no fue participe del despido de Sam Altman. Es más: diversos medios aseguran que la compañía de Seattle no fue notificada de esta decisión hasta 5 minutos antes de hacerse público.
Desde entonces, Microsoft ha presionado a la junta directiva para devolver a Sam Altman a su posición como CEO de OpenAI. Sin embargo, ante la negativa de sus miembros, Nadella ha decidido darle un nuevo hogar –laboralmente hablando– al cofundador de la compañía.
Sam Altman, además de llevar todo su conocimiento a Microsoft, también actuará como "gancho" para atraer talento. Especialmente, aquellos empleados de la startup que hayan quedado descontentos con la decisión de la junta directiva –muchos de los cuales han expresado a lo largo del fin de semana su apoyo a los damnificados a través de redes sociales–.