Final Fantasy VII Remake fue, sin duda, polémico. Para muchos, el mejor remake de la historia de PlayStation (quizás con perdón de algunos Resident Evil), para otros, se traicionó parte de la esencia del juego. Sea como sea, fue uno de los grandes lanzamientos, y sin duda, encantó a propios y extraños. Su secuela directa, que llegará próximamente, promete mucho más. Hemos tenido la oportunidad de probar Final Fantasy VII Rebirth, la segunda entrega de la trilogía que componen el arco del juego original.
No sabemos, a priori, si traerá la misma polémica que el juego anterior, puesto que Rebirth también cambiará la dinámica del juego original, pero lo sí te podemos adelantar es que se trata de una mejora en todos los aspectos respecto a Final Fantasy VII Remake. Tanto en narrativa como en combate y exploración, y sin caer en spoilers, alguna que otra sorpresa que hará las delicias de los fans.
Tuvimos la oportunidad de probar dos fases diferenciadas del juego, una más lineal enfocada en el combate, y otra dando libertad al jugar en una zona, de las muchas que habrá, que funcionan como forma de sandbox libre pero acotado. Similar, con algunos matices, al reciente Final Fantasy XVI.
De hecho, Final Fantasy VII Rebirth bebe de parte de las mecánicas de este último, combinando otros de los aspectos del Remake anterior. Una sutil mezcla que funciona como un guante para la secuela del remake, y que sin duda ofrece un dinamismo que estamos seguros, que va a convencer a tanto a los jugadores originales como a los que entraron por primera vez en la saga con el remake del VII.
Final Fantasy VII Rebirth: mundos semiabiertos con control total sobre los personajes jugables
Las secciones de "mundo abierto", permiten controlar en combate a cinco personajes en tres equipos preestablecidos, lo que permite combinar a Cloud, Tifa y Aerith. O a Aerith y Red XIII y Barret. A elección libre del jugador según las necesidades del combate. Muy interesante.
Al igual que la primera parte, el juego ofrecerá dos modos, Gráficos/Rendimiento, con el primero apuntando al 4K y el segundo a los 60 FPS. Nosotros hemos podido probar el modo gráfico, y lo cierto es que gráficamente luce espectacular, con escenarios brillantes y vivos y unos efectos de partículas en los combates que lucen de maravilla en la PS5.
De los combates, quizás el cambio más significativo, además de ser más rápidos y frenéticos, y tener la oportunidad de controlar a varios personajes en tiempo real. A este respecto, el jugador tiene varias combinaciones a su disposición. Los ataques estándar desencadenan combos cuerpo a cuerpo, mientras que mantener presionado el botón de ataque genera un ataque a distancia.
Pero lo verdaderamente novedoso de Final Fantasy VII Rebirth es la inclusión de las nuevas sinergias. Se trata de una habilidad que permiten a dos personajes combinar un ataque tremendamente potente. Por ejemplo, se pueden combinar los ataques de Cloud y Sephiroth (guiño, guiño) en un ataque en equipo llamado Dualblade Dance, devastador.
En general, unas mecánicas muy intersantes que estamos deseando probar en profundidad cuando Final Fantasy VII Rebirth llegue en exclusiva a PS5 a principios del año que viene.