Desde 2019, uno de los grandes objetivos de Apple es desarrollar su propio chip celular y cortar la dependencia de Qualcomm. Sin embargo, el desafío se ha vuelto mucho más complejo de lo pensado. Los de Cupertino están estancados en su esfuerzo por desarrollar un módem 5G para el iPhone, y el panorama para el futuro cercano no es alentador.
Así lo afirma un reporte de The Wall Street Journal, que echa luz sobre las dificultades en uno de los proyectos más audaces que ha encarado Apple en los últimos años. Una iniciativa que se ha visto especialmente afectada por metas poco realistas y la mala gestión de los equipos de trabajo.
Según el citado medio, Apple ha invertido miles de millones de dólares para desarrollar su propio módem 5G para el iPhone, obteniendo muy pobres resultados. Ni la tecnología adquirida a Intel, ni la contratación de un sinfín de ingenieros "robados" a dicha empresa y Qualcomm, habrían sido suficientes para cumplir con objetivos demasiado ambiciosos hasta para Apple.
Los encargados de crear el módem 5G del iPhone estarían repartidos en distintas ubicaciones, tanto en Estados Unidos como en otros países, y sufriendo por la falta de un líder definido. Si bien el proyecto está bajo el comando del histórico Johny Srouji, hasta ahora estaría resultando mucho más traumático de lo esperado.
Por qué Apple no avanza con su módem 5G para el iPhone
A fines de 2019, Apple habría establecido como meta que su propio módem 5G para el iPhone estuviera listo para 2023. Una meta que internamente se sabía imposible de cumplir, pero cuya inviabilidad recién se comprendió a fines del año pasado.
Cuando los de Cupertino comenzaron a probar los primeros prototipos de su chip, se dieron cuenta de que estaban en camino al desastre. El componente era lisa y llanamente inutilizable. Era lento, sobrecalentaba y, según las fuentes del WSJ, su circuitería era tan grande que ocupaba la mitad del espacio interior del iPhone.
Esto obligó a Apple a cambiar su hoja de ruta. El módem 5G propio no debutaría en el iPhone 15, sino en el iPhone 16 de 2024. Pero todo apunta a que ese plan también se ha descartado. No olvidemos que, de hecho, Qualcomm anunció recientemente la extensión de su acuerdo para continuar proveyendo su chip celular a los de la manzana hasta 2026.
Según el reporte, los prototipos del módem 5G de Apple para el iPhone hoy están 3 años por detrás del mejor chip de Qualcomm. Ponerse a la par de su actual proveedor —y otrora enemigo mortal— no se logrará de la noche a la mañana, y seguramente le cueste unos varios miles de millones de dólares más.
Un viaje extenso
Pero los problemas no serían solamente técnicos. La burocracia también estaría jugando su parte. Apple habría comprendido sobre la marcha las dificultades de certificar un módem celular que funcione con distintas tecnologías de telefonía móvil alrededor del mundo. Y termina siendo una paradoja que un proyecto nacido para librarse de la dependencia de terceros, esté tan atado a la palabra final de estos. En este caso, los entes regulatorios y las telcos.
Jaydeep Ranade, quien dirigió los desarrollos de tecnología inalámbrica de Apple hasta 2018, fue lapidario con el caso. Según su punto de vista, la complejidad de desarrollar un módem 5G para el iPhone supera ampliamente a la de cualquier otro semiconductor. "Solo porque Apple hace los mejores procesadores del planeta, es ridículo pensar que también podría producir un módem", le dijo a The Wall Street Journal.