El Twitter que conocíamos sigue en proceso de extinción. Su última controversia tiene que ver, una vez más, con las insignias de verificación. No obstante, en esta ocasión, Elon Musk ha tomado una decisión totalmente extrema: eliminar las marcas azules de todos los perfiles que no estén suscritos al servicio de Twitter Blue. Hasta ahora, esto parecía ir destinado a todas las cuentas, pero parece que la red social sí que tiene a sus favoritos.

Durante este fin de semana, varios perfiles que superan el millón de seguidores han reportado el regreso de la insignia azul. Entre estos se encuentran figuras como el escritor Neil Gaiman, el cantante Lil Nas X, la actriz Janel Parrish y el jugador de fútbol Riyad Maharez. ¿Cómo sabemos que estas personas no han pagado por una suscripción a Twitter Blue? Porque ellos mismos se han encargado de dejarlo en claro. Y es que, a pesar de ser dueños de las cuentas, tampoco saben qué está sucediendo.

"Estoy muy confundida con Twitter estos días... No pagué por la marca azul de verificación pero sigue allí. No lo sé, encuéntrenme en Instagram, no me importa", comenta Janel Parrish.

En una publicación similar, el autor Neil Gaiman asegura que "para los curiosos, no estoy suscrito a Twitter Blue. No he dado a nadie mi número telefónico. En qué triste y confuso lugar se ha convertido esto", y adjunta a su vez una captura de pantalla con un mensaje de la plataforma.

¿Qué está sucediendo ahora con las marcas de verificación de Twitter?

Las cosas dentro de la compañía parecen estar confundiendo a los usuarios. En el pasado, Elon Musk ya expresó su deseo de pagar personalmente la suscripción a Twitter Blue de ciertas celebridades. Entre ellas, a Lebron James, Stephen King y William Shantner. No obstante, aunque el empresario no ha confirmado ningún otro nombre, parece estar extendiéndose más allá.

Una teoría aseguraba que la insignia de verificación de Twitter sería restituida a cuentas con más de un millón de seguidores. Sin embargo, un programador llamado Travis Brown se ha dedicado a estudiar la situación y comenta que hay más de 110 cuentas que superan este número a las que todavía no les ha sido devuelta la marca característica.

En los últimos días, la mayor parte de cuentas que mantenían su marca de verificación por su relevancia la han perdido de forma repentina. Esto ha desatado la locura en la red social, con un grupo de personas negándose a pagar por la suscripción exigida por Musk, mientras que a otras no les ha quedado más remedio para evitar que su identidad sea suplantada.

La transición de Twitter al gobierno de Elon Musk está siendo bastante más accidentada de lo que al magnate le gustaría admitir. Desde despidos masivos sin justificación, hasta demandas al ejecutivo por no pagar las oficinas de la compañía en varias ciudades del mundo, pasando por la restitución de cuentas de supremacistas y otros personajes polarizantes. ¿Qué depara el futuro de la red social? No lo sabemos con certeza, pero no va por buen camino.