El ministro de Agricultura de Italia, Francesco Lollobrigida, ha declarado a Italia como la primera nación libre de alimentos sintéticos. Con ello, según explica el político, el gobierno de Meloni pretende prohibir la producción tanto de carne cultivada en laboratorio como de cualquier otro alimento artificial.

Asegura que de este modo protege tanto las tradiciones de su país, como la salud de sus habitantes. Es una medida muy controvertida, ya que la carne cultivada se ha presentado como una solución al gran impacto climático de la ganadería. Además, buena parte de la población la ve con buenos ojos por su capacidad para evitar mucho sufrimiento animal.

Por todo esto, la decisión de esta prohibición ha generado un gran revuelo en Italia. Lollobrigida sostiene que la medida se sustenta en la preocupación por Italia y los italianos. Pretende proteger la ganadería, de la que depende una parte de la economía del país, y también la salud. Esto último se basa en algunos estudios poco concluyentes que señalan a posibles peligros del consumo de carne cultivada. No obstante, los detractores de esta decisión del gobierno han mostrado su rechazo por eliminar la opción de los italianos a tomar sus propias decisiones. Además, aseguran que Italia se quedará retrasada con respecto a otros países europeos, en los que este tipo de productos comienzan a tener más relevancia.

Carne cultivada y sus posibles ventajas e inconvenientes

La carne cultivada es básicamente lo que su nombre indica. Se fabrica tras extraer una biopsia de las células musculares del animal en cuestión y cultivarlas en el laboratorio. Dado que solo es necesario obtener unas pocas células, no es necesario sacrificar a los animales. Sí habría que criarlos, pero no serían necesarias las típicas granjas de ganadería intensiva. 

Por eso, supone un impacto ambiental mucho menor, con menos emisiones de gases de efecto invernadero, derivados de la cría de los animales. Además, lógicamente, se reduce la crueldad animal.

Estas son las dos principales ventajas. Junto a ellas está el tema de la salud, que ha generado bastante más controversia. Por un lado, los defensores de la carne cultivada señalan que es más segura. Esto se debe a que solo se usan algunas células, no todo el animal, que ha estado expuesto al exterior y ha podido entrar en contacto con más microbios. Además, con respecto a su perfil nutricional, se podría controlar en el laboratorio la proporción de determinados nutrientes. Incluso se podrían sustituir ciertas grasas saturadas por otras insaturadas, más beneficiosas.

Por otro lado, los detractores de la carne cultivada opinan que su consumo puede suponer también ciertos riesgos. Esto se debe a que, dado que las técnicas de cultivo empleadas son relativamente nuevas, aún no es posible saber si podría descontrolarse la producción. Según ellos, sería posible que ese descontrol fuese similar al de las células que se vuelven tumorales. No se sabe cómo podría afectar el consumo de esta carne descontrolada a la salud de los humanos. Sin embargo, también es cierto que, simplemente, se podría retirar esta carne y que no llegue nunca hasta los consumidores.

Por ese motivo, en general las críticas hacia la producción de carne cultivada son positivas, al contrario de lo que señala desde el gobierno de Italia.

Italia
Mauricio Artieda (Unsplash)

¿Qué está pasando en Italia?

Según explican en IFLScience, las encuestas señalan que un 54% de la población italiana estaría dispuesta a probar la carne cultivada en laboratorio. 

Sin embargo, si la decisión de su gobierno sigue adelante, puede que no lo hagan, al menos en su país. De hecho, se planea imponer multas de hasta 60.000 euros a cualquier empresa que opte por producir este tipo de alimentos. Es una cifra demasiado cuantiosa como para jugársela.

Es importante tener en cuenta que, cuando la carne cultivada esté más extendida, los consumidores tendrán otras alternativas a la carne para elegir. Incluyendo los sustitutos basados en plantas que ya existen hoy en día. Incluso hay setas con un gran potencial nutricional, que podrían considerarse sustitutos interesantes.

Pero, en cualquier caso, es una decisión del consumidor. Y esa decisión es la que pretenden bloquear en Italia. No se podrá decidir, porque no contarán con esa opción. Lógicamente, esto está causando un gran disgusto en muchos sectores de la población italiana. Porque eliminar la capacidad de decisión del pueblo puede llegar a ser muy peligroso, sea en el tema que sea.

2 respuestas a “Italia quiere prohibir la carne de laboratorio por atentar contra sus tradiciones”