Cuentas compartidas de pago. Esta es la solución que ha adoptado Netflix para seguir engordando sus arcas. Tras años tolerándolas, ahora tendrás que pagar un extra de 5,99 euros al mes por cada usuario no conviviente con el que quieras compartir tu cuenta de Netflix. Es más: tendrás que especificar desde dónde vas a ver Netflix principalmente para evitar compartir cuentas sin pasar por caja. No obstante, existen formas de "engañar" al algoritmo de Netflix. Una de ellas: crear tu propia VPN en casa.
Según podemos leer en el Centro de ayuda de Netflix, “las cuentas de Netflix están pensadas para compartirse en un mismo hogar, es decir, entre personas que conviven con el titular de la cuenta”. Mientras que otras plataformas no ponen impedimentos a “compartir en familia”, Netflix sí quiere restringir el uso de sus servicios a un único domicilio. Por lo tanto, si compartes Netflix con tus padres o tu pareja y vivís en sitios distintos, tendréis que pagar un extra.
No obstante, si quieres engañar al sistema, siempre puedes configurar una VPN en casa para seguir usando las cuentas compartidas de Netflix desde cualquier parte y como si siempre estuvieras en tu “ubicación principal”.
Una VPN, recordemos, te conecta a internet con una IP diferente a la que en te corresponde en realidad. ¿Cómo? Haciendo que todo el tráfico entrante / saliente de tu dispositivo pase, antes de llegar al servidor, por uno o varios puntos intermedios. Por ejemplo:
- Imagina que envías un correo electrónico usando una VPN. La información del mismo saldrá de tu equipo, llegará a un servidor intermedio y este lo redirigirá al proveedor de correo en cuestión.
- Dicho proveedor de correo solo podrá ver la IP del servidor intermedio, que es el que establece la conexión. Por lo tanto, la IP del emisor real (el equipo desde el cual se redactó), por lo tanto, queda oculta.
Este sistema se puede utilizar para infinidad de cosas. Pero, en el caso que nos incumbe, la idea es crear una VPN en casa que redirija todo el tráfico del equipo en el que se configure hacia un servidor intermedio situado en la ubicación que se haya definido como principal en Netflix. De esta forma, podrás seguir usando las cuentas compartidas de Netflix sin pagar más. El servicio creerá que la IP es siempre la misma, incluso si los dispositivos están situados a kilómetros de distancia.
Y, por si alguno tiene la duda: Netflix no usará el GPS de tu teléfono móvil para determinar la ubicación. Lo dice explícitamente en su página web. Solo y exclusivamente utilizará la dirección IP de tu conexión.
¿Qué dice Netflix sobre sus cuentas compartidas y las conexiones VPN?
Netflix habla de los servidores VPN en su Centro de ayuda. “El uso de una VPN no es compatible con el plan Básico con anuncios”, dice. Sin embargo, no dice nada de los demás planes. Sí nos advierte que “al usar una VPN, solo podrás ver series y películas de las que Netflix sea el propietario de los derechos globales”.
Nuestro propósito, no obstante, es hacer creer al servicio que nos conectamos desde la ubicación principal aunque no estemos ahí. Es decir, configurar una máquina para que actúe como servidor VPN y use la IP de nuestro hogar. Sobre eso por el momento, Netflix no ha dicho nada.
Por otro lado, parece ser que la comprobación que hará Netflix de la ubicación no será constante. Es decir: solamente tendremos que usar a la VPN cada cierto tiempo.
Breve introducción a las VPN caseras
Los servicios VPN, gratuitos o de pago, funcionan ofreciendo decenas, centenares o miles de servidores VPN repartidos por todo el mundo. Tú eliges a cuál conectarte. En adelante, tu acceso a internet se realizará a través de él, por lo que tu ubicación, IP y dirección MAC reales no serán visibles.
Lo que vamos a hacer para seguir usando cuentas compartidas en Netflix desde cualquier lugar es crear nuestro propio servidor VPN en casa. Para ello, tan solo necesitas una máquina que haga de servidor VPN e instalar y configurar el software necesario. Luego, tendrás que conectarte desde otra máquina o dispositivo con un cliente VPN, que puede ser externo o venir integrado en el sistema operativo. La máquina que hará de servidor puede ser tu propio ordenador o cualquier dispositivo apto, como una Raspberry Pi o un router. Lo positivo es que un servidor VPN no requiere demasiada potencia.
A continuación vamos a poner dos ejemplos para configurar una VPN en casa y poder seguir usando cuentas compartidas de Netflix allá donde estés. El primero es el más rápido y fácil de instalar y configurar. Por otra parte, también te explicaremos el método tradicional para montar un servidor VPN en un PC con Windows.
Crea tu propia VPN en casa para seguir usando cuentas compartidas en Netflix
Poner en marcha tu propio servidor VPN en casa no es tarea compleja. Ya lo hemos visto antes. Así que vamos a tomar un atajo usando la aplicación Tailscale. Es gratuita para uso personal y admite hasta 20 dispositivos conectados con un mismo usuario. Si quieres más usuarios y otras funciones avanzadas, puedes optar por la versión de pago. Además, se puede instalar en Windows, macOS, Linux, iOS (iPhone, iPad) y Android, tanto para usar como servidor como cliente.
Para usar Tailscale tan solo tendrás que instalarlo en los dispositivos que quieres conectar entre sí. Por ejemplo, un PC o Mac que hará de servidor VPN y un dispositivo móvil, iPhone o Android, que se conectará al primero. La instalación no tienen ningún secreto. Sigue las instrucciones y, al terminar, tendrás que crear una cuenta de usuario. Esa cuenta te permitirá gestionar tus dispositivos y tu red VPN desde el navegador y desde las aplicaciones instaladas. Puedes usar tus credenciales de Google o Facebook para ir más rápido.
Una vez has instalado Tailscale en tu PC y en tu teléfono, para compartir la misma IP tendrás que activar una función llamada Exit node. Por defecto, Tailscale crea una red privada para conectar tus dispositivos y compartir archivos. Pero si quieres pasar el tráfico de internet de un dispositivo a través del que hace de servidor VPN en casa, tendrás que hacerlo usando la función Exit node.
Una misma IP para los dispositivos de tu VPN
Para activar Exit node tendrás que ir al menú de Tailscale del PC o Mac que hace de servidor VPN en casa y marcar Run Exit mode en el submenú Exit node. Luego tendrás que dar la aprobación en la consola de administrador. Puedes acceder a ella desde el navegador. El atajo a la dirección está en el menú de Tailscale. En la sección Machines de la consola de administrador, verás los dispositivos conectados a tu red VPN. Uno indicará Exit Node. Pulsa en el desplegable de la derecha, ve a Edit route settings y marca la opción Use as exit node.
Una vez tengas tu servidor VPN en casa con la función Exit node activada, para usarla tendrás que ir a tu segundo dispositivo, el que hace de cliente. Abre la app Tailscale, activa el servicio VPN, luego pulsa en el menú desplegable y pulsa en Use exit node… Aparecerá un indicador en verde diciendo algo así como Using exit node.
Para comprobar que tu VPN en casa con Tailscale funciona bien porque si preguntas tu IP en una página online, ambos dispositivos tendrán la misma dirección. Eso sí. En el segundo dispositivo, desconecta el WiFi y accede vía datos móviles para comprobar que la función Exit node funciona correctamente y redirige el tráfico a través del servidor VPN. Ahora ya puedes usar las cuentas compartidas de Netflix desde distintos lugares accediendo desde tu propia VPN casera.
El método tradicional para crear tu propia VPN en casa con un PC
Vamos a convertir un PC en tu propia VPN en casa. Podrás seguir usándolo para otras cosas sin problemas. Simplemente tendrás que mantenerlo encendido cuando necesites conectarte al servidor VPN. Así que mejor usar un PC de sobremesa. En cuanto al sistema operativo, cuanto más actual mejor. Por ejemplo, Windows 10 o Windows 11. Así podrás seguir usando cuentas compartidas en Netflix.
Windows tiene por defecto soporte para un protocolo VPN, PPTP. Aunque las empresas que hoy ofrecen servicios de VPN emplean protocolos más actuales y seguros como OpenVPN, implementarlo tiene sus dificultades. Así que vayamos a lo fácil. En el futuro siempre estarás a tiempo de dar el salto a OpenVPN o a otros protocolos similares.
Para empezar a montar nuestra VPN en casa desde Windows, tendremos que cambiar algunas cosas de la configuración de redes del sistema operativo. Físicamente, no tenemos que tocar nada del PC. Eso sí. Ayudará que lo tengas conectado al router por Ethernet, ya que la velocidad que obtendrás será mayor.
- Vamos a Configuración de Windows. Entramos en Red e Internet
- Otra opción es ir a Panel de control > Redes e Internet > Centro de redes y recursos…
- Buscamos la opción Cambiar configuración del adaptador
- Pulsamos la tecla F10 para ver el menú oculto
- Seleccionamos Archivo > Nueva conexión entrante…
- Elegimos la opción VPN o similar
- Creamos una cuenta para acceder a nuestro servidor VPN en casa
- Para ello, pulsamos en Agregar a alguien…
- Indicamos un nombre de usuario, contraseña, etc.
- En la siguiente ventana, marcamos que la conexión será A través de Internet
- En la siguiente ventana, marcamos Protocolo… IPv4 y pulsamos en Propiedades
- Marcamos la opción Especificar direcciones IP
Para saber qué rango de direcciones IP debemos indicarle a Windows para hacer de VPN en casa, usaremos el comando ipconfig desde el Símbolo de sistema de Windows o Terminal. Puedes abrirlo pulsando a la vez Tecla Windows + R y escribiendo CMD y pulsando Enter. Al introducir el comando ipcconfig tienes que apuntar cuál es tu “Puerta de enlace predeterminada”. Esa IP es la de tu router. Normalmente es 192.168.1.1.
Así que volviendo a Especificar direcciones IP, vamos a indicar un rango de direcciones IP que puede ser 192.168.20 a 1.92.168.30. Con once IP tendremos más que suficiente, ya que solamente compartiremos nuestra cuenta de Netflix con unas pocas personas.
Abrir los puertos para tu VPN en casa
Una vez introducido el rango de direcciones IP, pulsamos en Aceptar > Permitir acceso y ya tendremos nuestro propio servidor VPN en casa listo para funcionar. Pero ahora tendremos que hacer cambios en el cortafuegos de Windows y en el router para que la conexión al servidor VPN sea fluida y no dé problemas con los puertos.
En el router, tendrás que abrir el puerto 1723 TCP. Para hacerlo, dependerá de cada router. Normalmente se accede desde un navegador con la dirección 192.168.1.1. Busca la opción de abrir puertos y configura el que hemos indicado. Si tienes que indicar también la IP local de tu PC, la sabrás con el comando ipconfig buscando Dirección IPv4.
En el cortafuegos de Windows, tendrás que ir a Seguridad de Windows > Firewall y pulsar en Permitir una aplicación a través de firewall. Allí tendrás que activar la opción Enrutamiento y acceso remoto. Puede cambiar según estés en Windows 10 o Windows 11. En cualquier caso, marca tanto la opción Privada como Pública.