Siempre se ha dicho que el perro es el mejor amigo del hombre. Ahora, parece que esto no se limitaría a los perros de carne y hueso. Según recoge Space, la NASA podría estar preparándose para enviar perros robots a sus misiones lunares. Así, la Misión Artemis no dejará sola a la humanidad.
Si tienes un perro o has pasado un tiempo observando a uno, sabrás cuáles son algunos de sus pasatiempos favoritos, como escarbar, saltar y explorar sitios desconocidos. Pues bien, parece que la NASA estaría intentando replicar este mismo comportamiento en sus perros robots del programa Artemis, y servirían de compañía y herramienta a los futuros astronautas.
LEAP es el concepto del perro robot, y acrónimo de Legged Exploration of the Aristarchus Plateau. La Meseta de Aristarco —traducida al español—, es una elevación rocosa en la superficie lunar. Esta zona ha estado bajo estudio de la ESA, y una de las que han querido explorar desde hace mucho tiempo.
El mejor amigo del hombre va a la Luna gracias a la NASA
Para enviar a sus perros robot a la Luna, la ESA usaría su European Large Logistics Lander (EL3). Esta nave será la encargada de trasladar cargas y experimentos a la superficie lunar, y se espera que su primera misión tenga lugar a finales de esta misma década. Por supuesto, LEAP iría en su interior con destino a la Luna, donde tendrá la tarea de explorar la región.
LEAP, por su parte, tiene forma de un ser cuadrúpedo. Aunque no parezca un perro exactamente, sí que nos ofrece una idea de lo que podría aportar a las misiones de la NASA y la ESA en el futuro.
Con el robot, podemos investigar características clave para estudiar la historia geológica y la evolución de la Luna, como los eyectas alrededor de los cráteres, los lugares de impacto recientes y los tubos de lava colapsados, donde el material puede no haber sido alterado por la meteorización espacial y otros procesos.
Patrick Bambach, ingeniero del Instituto Max Planck para la Investigación del Sistema Solar en Alemania
Por otro lado, el diseño de LEAP se ha inspirado en otro famoso perro robot llamado ANYmal, desarrollado por la compañía ANYbotics. Este último, por su parte, tiene la habilidad para caer y levantarse, subir pendientes pronunciadas, cavar canales en el suelo, y usar sus patas para voltear rocas y revisar qué hay debajo. Estas son las bases esenciales de lo que necesitará el robot de la NASA y la ESA para la exploración lunar.
Una nueva generación de exploración lunar
Los rovers han sido una herramienta esencial en la exploración de otras regiones en el espacio. Un ejemplo de esto es el Curiosity, el cual se encuentra estudiando y extrayendo información de la superficie de Marte. Ahora, la llegada de los perros robot LEAP llevarían estas mismas posibilidades mucho más lejos.
Sin embargo, las cosas todavía están bastante crudas dentro de las oficinas de la NASA y la ESA. Eso sí, ya se habría probado un robot de este estilo en un escenario simulado, para estudiar sus posibilidades y limitaciones con las condiciones de gravedad y otras propiedades de la Luna.
En cuanto a sus dimensiones, el equipo espera que LEAP tenga un peso de 50 Kg en masa, perteneciendo una quinta parte de esta cantidad a cargas científicas.
Los rovers tradicionales han permitido grandes descubrimientos en la Luna y Marte, pero tienen limitaciones. La exploración de terrenos con tierra suelta, grandes rocas o pendientes de más de 15 grados es especialmente difícil con ruedas. Por ejemplo, la misión del explorador de Marte, Spirit, terminó cuando se atascó en la arena.
Patrick Bambach, ingeniero del Instituto Max Planck para la Investigación del Sistema Solar en Alemania