NSO Group, la empresa israelí conocida por desarrollar el software espía Pegasus, anunció la salida de Shalev Hulio, su CEO, como parte de su plan de reorganización. El ejecutivo ha sido reemplazado por Yaron Shohat, quien anteriormente se desempeñaba como jefe de operaciones.

El cambio de directivos se da después de largos meses de turbulencia, tras salir a la luz el uso de Pegasus para espiar a políticos, periodistas y activistas en distintas partes del mundo. Además, la aparente venta del spyware a países que se encuentran bajo escrutinio por violar los Derechos Humanos y no respetar la libertad de expresión —tales como Arabia Saudí y Ruanda—, ha elevado el calibre de las críticas a nivel internacional.

El despido de Hulio como CEO del NSO Group se da como parte de un proceso de reestructuración más amplio. La compañía también pretende despedir a 100 empleados, lo que representa un 13% de su fuerza laboral actual, así como modificar su plan de negocios para centrarlo en los países que forman parte de la OTAN. "La empresa se está reorganizando como preparación para la próxima fase de crecimiento", indicaron.

Por lo pronto no existen demasiadas precisiones con respecto a cuáles serían los planes de los creadores de Pegasus para sostener o fortalecer su vínculo con la OTAN. Tampoco se sabe a ciencia cierta qué países han adquirido el software espía u otros servicios provistos por NSO Group. Esto, debido a que su lista de clientes ha permanecido confidencial. Según The Wall Street Journal, en 2021 la firma israelí mencionó que poseía 60 clientes en 40 países, entre ellos 12 de la Unión Europea.

También se indica que desde la compañía están "examinando el futuro" de los contratos con países que no forman parte de la OTAN. No olvidemos que cuando se destapó el escándalo de Pegasus, NSO Group bloqueó el acceso al spyware a ciertos organismos gubernamentales por aparente mal uso. Entre ellos aparecían agencias de México, Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudí.

NSO Group no puede dejar atrás el escándalo de Pegasus

NSO Group | Pegasus

Desde que se desató el escándalo de Pegasus, NSO Group se ha convertido en blanco recurrente de críticas y sanciones a nivel internacional. En noviembre del año pasado, Estados Unidos incluyó a la empresa en su lista negra, por considerarla una amenaza contra la seguridad nacional. A eso se le sumó una demanda de Apple, por el uso del software espía en cuestión en labores de espionaje contra usuarios del iPhone.

Un punto llamativo de esta historia es que la salida de Shalev Hulio como CEO no es la primera que sufre NSO Group este año. En enero ya había padecido el alejamiento de Asher Levy, aunque el exdirector aseguró que su partida estaba planeada "desde hacía meses" y que no tenía nada que ver con el escándalo.

Lo cierto es que el panorama de la compañía no parece demasiado alentador. El reporte de WSJ menciona que los creadores del spyware Pegasus tenían una deuda estimada de 500 millones de dólares. Y que la polémica los ponía en riesgo de no poder cumplir con su pago. Ante este panorama, no estaría descartada una posible venta o un plan de refinanciación. Incluso ya habrían existido conversaciones con potenciales compradores, aunque no se sabe si serían de Estados Unidos u otros países.