Durante los últimos dos años hemos hablado hasta el cansancio sobre la escasez de semiconductores y su impacto en un sinfín de industrias. Por meses, conseguir una GPU era una misión imposible, y ni que hablar de una PS5 o una Xbox Series X|S; mientras que la industria automotriz hacía malabares para mantener sus líneas de producción activas, y hasta las tarjetas de crédito se veían afectadas por el panorama adverso. Los fabricantes de chips no daban abasto con la tremenda demanda de sus clientes, pero en cuestión de pocos meses la historia ha dado un giro inesperado y ahora padecen un exceso de inventario.

Lo que está ocurriendo con la industria de los semiconductores es el colmo de los colmos, sin lugar a dudas. Según reporta Financial Times, los principales fabricantes de chips —como Intel, NVIDIA y Micron— ahora se enfrentan a un escenario inaudito. Es que sufren de un exceso de componentes que termina incrementando su inventario, cuando muchos sectores todavía están afligidos por la escasez y no han logrado establecer un "suministro confiable" de chips. En este último caso, el citado medio menciona a las automotrices y otras compañías que forman parte de mercados industriales.

Si te preguntas por qué se da esta situación tan peculiar, la principal causa es la caída en la demanda de los consumidores. Esto ha llevado a una drástica caída en las ventas de ordenadores —sector que acarreaba una bonanza por la pandemia y la demanda de equipos para trabajar y estudiar desde casa—, así como un interés menor por los smartphones disponibles en el mercado.

Por otra parte, las empresas que estaban desesperadas por conseguir procesadores, memorias y otros tipos de semiconductores utilizados en sus productos para hacerse de una reserva que les permitiera pararse más firmes ante la demanda del público, también han abandonado esa táctica. Así las cosas, los componentes no salen de las instalaciones de los fabricantes de chips al ritmo esperado. Como resultado, esto provoca que se terminen acumulando en su propio inventario.

De la escasez al exceso de inventario, la inaudita situación que enfrentan los fabricantes de chips

fabricantes de chips

Financial Times menciona que en febrero pasado, la cantidad de chips disponibles en el inventario de los fabricantes alcanzaba para cubrir 1,2 meses de producción. Sin embargo, esa cifra ha escalado a 1,7 meses en julio pasado. La estadística ha provocado la incredulidad hasta en los analistas a cargo de estudiar los movimientos de mercado.

El informe cita a Dan Hutcheson, de la firma VLSI Research, quien asegura que el escenario es sencillamente insólito. "Nunca he visto un momento en que tuviéramos un inventario excesivo y escasez", manifestó el especialista.

La situación ya les ha pasado factura a los principales fabricantes de chips, que recientemente han informado desplomes en sus ingresos. En el caso de Intel, su último informe financiero reveló una caída del 22% interanual y un ingreso trimestral de 2.600 millones de dólares. Este último dato estuvo un 15% por debajo de lo esperado.

En tanto que NVIDIA anunció los resultados financieros preliminares del segundo trimestre del año fiscal 2023 y los números fueron abrumadores, pero para mal. El principal fabricante de GPU sufrió una caída de ingresos del 19% comparada con el trimestre previo. Pero lo más notorio fue un desplome del 44% en los ingresos por gaming en comparación con los tres meses anteriores.

Y si bien el panorama también se ve complicado para el mercado de semiconductores en Asia, los mayores problemas parecen estar en EE.UU. La caída de los ingresos ha llevado a que los fabricantes de chips más importantes recorten sumas multimillonarias que iban a destinar a gastos de capital planificados.

Para colmo, casi en simultáneo, Joe Biden, el presidente de Estados Unidos, firmó la ley que otorgará subsidios por más de 50.000 millones de dólares para instalar más fábricas de semiconductores en Norteamérica y cortar la dependencia con proveedores asiáticos, justo cuando las compañías no saben qué hacer con tanto inventario. Una cosa no quita la otra, claro, pero pone de manifiesto el cambiante panorama del sector.