La insurrección de las máquinas, uno de los mayores miedos de los conspiranoicos, ya está aquí, y ha comenzado por los coches autónomos. En Mashable compartieron el vídeo en el que se aprecia a un vehículo autónomo huyendo de un cuerpo policial estadounidense después de que estos intentaran detenerlo reiteradas veces.

En el vídeo podemos ver a un grupo de oficiales del Departamento de Policías de San Francisco intentando detener a un vehículo autónomo. No obstante, cada vez que los policías detenían el vehículo e intentaban abrir una de sus puertas, esta arrancaba nuevamente ignorando las peticiones policiales.

Por supuesto, dentro del vehículo no había ningún ser humano al volante. Se trata de un coche que se encontraba conduciendo de forma autónoma por la ciudad, cual película de ciencia ficción ochentera.

Según Mashable, el grupo de policías intentó detener al coche muy probablemente porque sus faros se encontraban apagados. Sin embargo, incluso después de lograr detenerlo por segunda vez, los oficiales estuvieron un largo rato intentando abrir sus puertas. Cruise, quien es la compañía que opera dicho vehículo, ha confirmado que el vehículo se comportó como era de esperarse.

Tras detener el Chevy Bolt, un agente de policía se acerca a su ventanilla; intenta (sin éxito) abrir la puerta y comienza a caminar de vuelta a su patrulla.

El vehículo autónomo comienza a alejarse en lo que al principio parece el comienzo perfecto de una persecución policial; pero luego se detiene y pone sus intermitentes en un punto más alejado de la carretera.

La policía vuelve a conducir detrás del vehículo, sale del coche y se queda alrededor del vehículo mientras, presumiblemente, intenta averiguar cómo volver a encender los faros.

The Verge

Este es el comportamiento de los coches autónomos

Coche autónomo de Cruise

Aaron Mclear, portavoz de Cruise, aclaró a The Verge el motivo del "comportamiento" del coche autónomo. Según comenta en sus declaraciones, el vehículo no estaba realmente intentando huir de la policía. De hecho, su sistema se encontraba trabajando en ubicar una zona más segura en la que ser detenido. Por supuesto, esto es un gesto en el que un ser humano no podría haberse salido con la suya.

El vehículo cedió el paso al coche de policía, y luego se detuvo en el lugar seguro más cercano para la retención de tráfico. Un agente se puso en contacto con el personal del Cruise y no se emitió ninguna citación.

Trabajamos estrechamente con la policía de San Francisco sobre cómo interactuar con nuestros vehículos y tenemos un número de teléfono específico para que llamen en situaciones como ésta.

Aaron Mclear, portavoz de Cruise

Los coches autónomos de Cruise están bastante bien preparados para moverse por las calles. Al igual que muchos otros vehículos de este tipo, estos modelos usan un sensor LiDAR que les permite reconocer su entorno con una precisión bastante alta. Dicho sensor es tan poderoso que incluso lo ha usado la NASA en sus misiones; y la mismísima Apple lo incluye en sus dispositivos iPhone y iPad desde hace años.

Hasta ahora, no se sabe por qué el vehículo autónomo de Cruise no operaba con los faros encendidos. No obstante, después de que los oficiales se comunicasen con la compañía, el problema fue solventado rápidamente. Entre las teorías de por qué se encontraban las luces apagadas tenemos que tal vez el coche falló en detectar la oscuridad.

Las luces encendidas en un vehículo autónomo de Cruise son bastante importantes. Después de todo, estos coches solo tienen permitido circular entre las 10 PM y 6 AM; horas en las que la necesidad de tener los faros en perfecto estado es bastante más imperiosa que en situaciones de buena luminosidad.