La guerra entre Rusia y Ucrania está dando pie a una batería de medidas nunca antes vistas por parte del conglomerado de la Unión Europea. Entre las últimas: cerrar todo el espacio aéreo a aeronaves de procedencia rusa, el apoyo logístico en financiación y envío de armas a Ucrania o el veto de medios-estado como RT (Russia Today) y Sputnik.

Así lo ha anunciado este domingo Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, en una comparencia extraordiaria. "En otra acción sin precedentes, prohibiremos en la UE la maquinaria mediática del Kremlin. Las empresas estatales Russia Today y Sputnik, así como sus filiales, ya no podrán difundir sus mentiras para justificar la guerra de Putin y sembrar división en nuestra unión", ha expresado.

Tanto RT como Sputnik son medios con una larga historia de afinidad al Gobierno ruso, presentes de manera internacional y en varios idiomas. A través de prensa online, YouTube e incluso canales de televisión, ofrecen información en muchas ocasiones sesgada de acuerdo a los intereses de Moscú.

Algo que terminará ahora de manera efectiva en el ámbito de la UE, según el nuevo paquete de medidas que se introducirá próximamente. De este modo, la visión de Rusia en lo que al conflicto en Ucrania se refiere quedará limitada. Ambos medios cuentan con canales de difusión en español, y RT está disponible como canal televisivo a través de Movistar España, por ejemplo.

YouTube, Facebook o Twitter, entre otros, han anunciado medidas para controlar la desinformación de estos medios, suprimiéndolos o limitando sus posibilidades en estas plataformas.

Internet, clave en el conflicto Rusia-Ucrania

Internet juega una parte trascendental en el conflicto bélico actual, más aún cuando uno de los implicados es Rusia, donde las comunicaciones online siempre son miradas con un intenso escrutinio.

En este sentido, es de esperar que Moscú tome acciones similares contra medios occidentales en las próximas horas, como respuesta a lo anunciado por von der Leyen. Ya ha sido así en el pasado, forzando a medios locales alemanes a parar sus operaciones en el país después de que el país hiciera lo propio con la versión local de RT.

No sería la primera medida tomada en este aspecto en el conflicto Rusia-Ucrania. Bajo las órdenes de Putin, el país ha limitado ya el acceso a Facebook y Twitter en un intento por controlar el discurso en torno a los sucesos.

Mientras, vuelve a ponerse de relevancia lo relativo a RuNet, el intento y deseo ruso por crear su propia versión censurada de internet local. Todo con tal de controlar qué ven, qué escuchan y qué publican sus habitantes.