Uno de los problemas históricos de la Nintendo Switch es la deriva (drift) que se detecta en los Joy-Con después de un tiempo de uso. La misma provoca que las palancas analógicas registren movimientos cuando el jugador no las toca.
Para ser más específicos, la causa del problema en los Joy-Con es que se aflojan las solapas metálicas que están en la base de los sticks. Esto genera una pérdida de contacto entre las almohadillas y las puntas metálicas que registran los ingresos. Este defecto en los mandos de la Nintendo Switch les ha traído varios dolores de cabeza a los directivos de Nintendo, y ahora la compañía ha dado a entender que nunca habrá una solución definitiva.
Un par de ingenieros de la empresa japonesa hicieron referencia al tema en la sesión de preguntas y respuestas Ask the Developer. La misma se dio en el marco de la llegada al mercado de la Nintendo Switch OLED, que se encuentra oficialmente disponible desde hoy. Toru Yamashita, director general adjunto del Departamento de Desarrollo de Tecnología de Nintendo, se refirió al avance en el desarrollo de los mandos:
Los Joy-Con tienen muchas funciones diferentes, por lo que hemos seguido realizando mejoras que pueden no siempre ser visibles. [...] Las partes del stick analógico se han optimizado continuamente desde el lanzamiento y todavía estamos trabajando en mejoras.
Las partes de los joysticks analógicos Joy-Con no son algo que se pueda comprar de fábrica, sino que están especialmente diseñadas. Por ello hemos pasado por muchas consideraciones para mejorarlas. Además, mejoramos la prueba de confiabilidad en sí y continuamos realizando cambios para mejorar la durabilidad y aprobar esta nueva prueba.
Pero más allá de lo dicho por Yamashita, lo más interesante llegó a través de Ko Shiota. El también directivo del Departamento de Desarrollo de Tecnología fue consultado sobre si creían que el desgaste en los mandos de la Nintendo Switch era inevitable por tratarse de piezas en permanente contacto físico. Esta fue su respuesta:
Sí. Como ejemplo, los neumáticos de los automóviles se desgastan a medida que el automóvil se mueve, ya que están en constante fricción con el suelo para girar. Entonces, con esa misma premisa, nos preguntamos: ¿Cómo podemos mejorar la durabilidad?; y no solo eso, sino ¿Cómo pueden coexistir tanto la operabilidad como la durabilidad? Es algo que abordamos continuamente.
Para Nintendo, la deriva en los Joy-Con de la Switch es inevitable
Lo que han hecho Yamashita y Shiota es reconocer que, sin importar cuánto mejoren los sticks analógicos en los mandos de la Nintendo Switch, el problema reaparecerá tarde o temprano. Lo peculiar en esta historia es que muchos de los usuarios que han sufrido el drift en los Joy-Con no los han sometido a un castigo intensivo.
Además, ha quedado demostrado que el problema es fácilmente solucionable con un hack casero. En julio les contamos que solo se necesita un pequeño trozo de papel de un milímetro de espesor para reparar los mandos. El mismo se encarga de mantener la presión entre los componentes de la palanca para evitar que se suelten y se pierda el contacto.
Nintendo asegura que desde el lanzamiento de la Switch en 2017 se han hecho mejoras continuas en los mandos. Sin embargo, es difícil de creer que la empresa se resigne a que la experiencia de los jugadores se vea afectada por siempre responsabilizando al "desgaste" de los componentes, incluso cuando son nuevos. Más aún cuando el drift ha sido el único problema técnico real que ha sufrido la consola desde que llegó al mercado.