En mitad de la vorágine de los riders en Barcelona –ahora con una huelga paralizada, de momento–, Glovo anuncia la adquisición de otra startup con historia: Lola Market. Es la confirmación definitiva de que el futuro del unicornio español está directamente enfocado con el negocio de los supermercados online o Q-Commerce; uno que comenzó hace algo más de un año y que ya es el protagonista indiscutible para la compañía junto a los restaurantes. De hecho, con esta adquisición, la división Q-Commerce alcanzará un valor bruto de más de 300 millones de euros a finales de 2021 y que espera superar los 1.000 millones de euros para 2022, según cifras de la compañía.
Los detalles de la compra son escasos en cualquier caso. Sobre la mesa, el hecho de que Glovo ha adquirido los negocios de Lola Market en España; así como el negocio de Mercadão en Portugal –su par en el país vecino–. Juntos ya suman más de 30 establecimientos de compra en diferentes ciudades.
Ahora bien, el negocio de Lola Market marca una diferencia respecto al de Glovo. Si el unicornio se ha estado especializando en las compras de proximidad con sus propios establecimientos localizados en puntos estratégicos de las ciudades, el caso de Lola Market es completamente diferente. Son Personal Shopper –que ahora podremos llamar riders– los que acuden a grandes supermercados como Lidl o Carrefour a hacer la compra solicitada. Además de una reducción de costes de local, permite controlar una oferta de productos más amplia.
Esto tiene un sentido: compras más grandes que puedan conquistar a un público que realiza la compra semanal y no puntual como el negocio de Glovo había estado controlando hasta la fecha.
"Vemos un gran potencial en las compras de alimentación bajo demanda y tanto Lola Market como Mercadão son plataformas de referencia en sus países de origen. Sumando los dos marketplace, vamos a poder construir relaciones aún más fuertes con los establecimientos con los que colaboramos y ofrecer un servicio más completo. Ambas compras representan un gran avance para nosotros porque vamos a poder servir todos los tipos y momentos de compras en el segmento de alimentación”, apunta Oscar Pierre, CEO y Co fundador de Glovo en un comunicado.
Lola Market, un clásico en el sector de las compras online
Lola Market no es nueva en el negocio de las compras online a través de Personal Shopper. La compañía fundada por Luis Pérez del Val lleva desde 2015 operando en el sector. Mucho antes de que Glovo despuntase y entendiese que las compras online eran un filón complementario al de la comida a domicilio.
Lola Market y Comprea, rivales hasta que en 2018 la primera adquirise la segunda, vieron la oportunidad de negocio mucho antes que otros. Javier de la Llave, fundador de Comprea, explicaba a Hipertextual que cuando en 2014 solo el 1% de las compras eran del mundo online el negocio a futuro estaba claro. De hecho, de la Llave siempre insistió en un hecho: pese al éxito que comenzó a granjearse a través de Comprea, su negocio nunca fue un pelotazo. Durante muchos años cada euro se estiró hasta lo imposible para seguir adelante como se pudiese.
Tras eso, el resto es historia del emprendimiento en España. Cuando ambas compañías firmaron su acuerdo allá por 2018, llegó el momento de la integración de ambas compañías. Unas que ahora, en 2021, se unen finalmente al gigante indiscutible del sector de las compras online: Glovo.
Glovo y las huelgas de riders en Barcelona
Mientras Glovo cierra la compra de Lola Market por un lado, la compañía sigue bregando con los riders de los supermercados en Barcelona. Independientes a los repartidores de comida, este grupo inició una huelga pionera en el sector. Una que, de momento, se mantiene paralizada ante las negociaciones que mantiene Glovo con los propios riders.
El colectivo buscaba pasar de sus contratos con una de las filiales ETT de Job and Talent a unos indefinidos directamente con Glovo. De momento, y según fuentes cercanas a las negociaciones, estos contratos se están materializando. Poco a poco. Gracias al parón de dos días y después de la huelga convocada con la colaboración de CC.OO., "aún quedamos muchos sin contrato pero al parecer van a contratar por lotes de forma semanal", explican a Hipertextual. Por otro lado, también se encuentran en el proceso de analizar los contratos que se le ha ofrecido a este colectivo, porque pese a haber logrado algo entienden que aún queda mucho por delante.
En cuanto a los problemas con los contratos, y como explican varios de los afectados, el primero de ellos radica en el hecho de estar bajo el convenio de comercio cuando tendría que estar bajo el de transporte de alimentos por carretera. Esto, cuentan, hace que Glovo no tenga la exigencia de poner vehículo (si este se estropea, el rider deberá reponerlo en 24 horas), móvil, mantenimiento, así como la obligación de mantener exclusividad laboral. Añaden, además, que se han implantado reducciones de jornada con kilometrajes por encima de lo normal.
¿Cuántos contratos se han cerrado ya? Carmen Juarez Llar, portavoz de CC.OO. en Barcelona, no quería hacer estimaciones de cuántos contratos se habían cerrado hasta el momento. "El objetivo es el 100%, pero entendemos que vengan poco a poco y primero a los que les va a concluir el contrato temporal que tienen", explica a Hipertextual. Desde varios grupos de riders, confirman que al menos el 25% de los casi 350 repartidores actuales ya cuentan con un modelo asociado a Glovo. Pocos en su opinión que, sin embargo, ya son suficientes para gestionar al 100% la flota de uno de los locales de la compañía. Desde el 9 de septiembre, el local de Consell de Cent 133 ya es completamente operativo con riders contratados por la compañía de forma directa.
Ahora, y con la unión de Lola Market, habrá que ver cómo se gestiona la actividad de los llamados Personal Shopper de la compañía bajo el nuevo modelo laboral de Glovo.