No es un podcast, pero se le acerca. Netflix, al menos en su versión para Android, está probando una nueva función que permite escuchar los contenidos cuando no sea posible mirar la televisión.
¿La tele de fondo de toda la vida? Sí, porque no inventan nada que no se haya hecho antes, pero viene con una opción añadida: quitar el vídeo y mantener el audio. Esto, sin duda, es una ventaja para aquellos que tengan consumo de datos limitado, ya que permitirá reducir la tasa de Netflix. También para el consumo de batería si se está viendo, o escuchando en este caso, desde una tablet o un móvil.
De momento, solo es una versión de prueba para algunos dispositivos y usuarios. Por lo que no queda claro si finalmente, Netflix integrará la opción podcast en todas las cuentas que controla o si se quedará en el limbo. Tampoco si la mayor productora de contenido original del momento creará series o películas bajo este formato; es, ante todo, solo una opción dentro de lo que ya tiene Netflix en su contenido streaming.
Igualmente, de llegar a ser una realidad para todos los usuarios, sería un golpe sobre la mesa para la plataforma estadounidense. El podcast, en todas sus versiones, ha sido la gran apuesta de todas las tecnológicas audiovisuales durante el último año.
Un año para el universo de los audiolibros y podcast
Si bien es cierto que el 2020 ha sido desolador para un gran número de negocios y sectores económicos, el podcast vive su año dorado. iVoox comenzó en un sector que poco a poco ha ido dando pasos de gigante. Spotify secundó la batalla con una fuerte apuesta por lo que ya se venía viendo en los contenidos streaming de series y películas: solo habría éxito en el podcast si los contenidos propios marcaban la diferencia. La compañía sueca pronto lanzó una inversión millonaria para contratar voces conocidas que alimentasen su contenido en diferentes idiomas. Pronto Apple entendió que era el momento de entrar en el sector podcast.
Sin embargo, ha sido la entrada de los últimos jugadores del mercado lo que ha puesto un punto de interés a la situación. Primero Podimo, justo durante la pandemia y con un sistema freemium: acceso gratis a algunos contenidos y pago de una cuota mensual para los exclusivos. Añaden, además, retribución a los creadores de contenido en función del volumen de escuchar. Al igual que sus antecesores, la contratación de voces conocidas ha sido su punto diferencial.
Pero entonces llegó Audible, de la mano de Amazon, y con un sistema de suscripción con una de las apuestas más fuertes por el universo de los podcast y los audiolibros. La versión de audio de la multinacional de venta online aterrizaba en España hace apenas unas semanas con un catálogo de más de 90.000 audiolibros, 6.700 de ellos en castellano y un gran número de podcast.