Según en qué año hayas nacido, es muy probable que por tus manos haya pasado toda la evolución de una de las industrias más diferenciales de lo que va de siglo: la de los teléfonos móviles.

Marcas como Nokia, Sony Ericsson o Motorola nos suenan hoy a pasado, mientras que en los últimos años firmas que hasta hace poco nos sonaban a chino -porque simplemente lo son- han entrado con fuerza en la cuota de mercado de los mayores fabricantes.

Dos décadas dan para mucho en cualquier sector, pero en el de los móviles plantear el inicio del relato en el año 2000 supone hacerlo desde el modelo mítico del Nokia 3310 para ver toda su evolución: la llegada de la pantalla a color, de las primeras conexiones a internet, los MMS, la llegada del primer iPhone, la caída de las viejas marcas, la entrada de las asiáticas, el aumento de las pantallas táctiles hasta hacerlas cada vez más grandes y omnipresentes, hasta lo que parece que se quiere introducir como el futuro: los nuevos móviles plegables que comenzaron a entrar en 2019 en el mercado aún es una fase muy experimental.

En este terremoto empresarial donde grandes firmas entran, salen o son absorbidas por otras, y modelos hegemónicos han quedado completamente obsoletos en poco menos de un año, también han cambiado los sistemas operativos (¿recuerdas Symbian?) o la conectividad. Una visión en perspectiva en el que ha influido como no podía ser de otra forma la propia evolución social y económica del mundo: hace dos décadas la venta de smartphones en China o India no tenía nada que ver con la actual.

¿Por qué ahora los teléfonos plegables? Breve historia de las pantallas flexibles

Hagamos pues, ahora a un mes del Mobile World Congress 2020 de Barcelona, una revisión a vista de pájaro de todo lo que ha cambiado en el mercado mobile en estos últimos 20 años:

Hubo un tiempo en el que Nokia tenía un 30% del mercado

Para comienzos de milenio, el móvil era ya un dispositivo bastante instaurado. Atrás había quedado el Motorola DynaTAC, el ladrillo que fue el primer teléfono que se podía sostener con una sola mano. Eran los tiempos de Nokia y su pujanza con los indestructibles y hoy casi piezas de nostalgia 3210 y 3310. La época de los SMS, de las llamadas perdidas como método de micro-comunicación y, en definitiva, cuando el consumo mayoritario de móviles dejó en la estacada a los buscas.

Hemos escogido tres fechas para ver cómo han evolucionado los principales actores en el mercado. En la siguiente gráfica se puede ver sus cambios, desde el año 2000, cuando Nokia contaba con una cuota de mercado sobre el total de ventas del 30%, seguida de Sony Ericsson o Motorola, pasando por 2010, con Samsung ya ganado bastante cuota y las apariciones de Apple o RIM (Blackberry), hasta los útimos reportes de 2019, donde a la dicotomía como punteros tecnológicos de la empresa de Cupertino y la coreana se le han sumado ya con fuerza Huawei, Xiaomi u Oppo.

Huawei amenaza el reinado de Samsung, ¿será este el año del «sorpasso»?

En el siguiente gráfico se pueden ver estos cambios por los fabricantes que más cuota de ventas tenían en cada uno de estos años:

Marcas de otra época:

En el gráfico podemos ver algunas firmas que han pasado de suponer grandes dominadores a tener un valor residual, con sus marcas vendidas o en algunos casos absorbidas o incluso defenestradas. Para poner en contexto, este es el estado actual de los Nokia, Blackberry o Siemens:

Nokia

Tras dominar el mercado desde 1999 a 2011 -se dice pronto-, la finesa Nokia no supo subirse al carro de los smartphone que propulsó la aparición del primer iPhone. Primero cerró un acuerdo para integrarse con Microsoft Mobile, que posteriormente acabó comprando toda su división de telefonía en 2014, para vender la marca y su licencia después a la también finlandesa HMD Global, creada con parte de los cimientos de la anterior, que sigue vendiendo los Nokia actuales e incluso recuperó el 3310 hace unos años en una versión con 3G.

Motorola

Poco queda de la empresa que fue pionera en móviles. En 2011 Google se hizo con su división por más de 12.000 millones para venderla tres años después a Lenovo por poco más de 2.000, que ahora es el dueño de la marca. Eso sí, Google se quedó con buena parte de las patentes de Motorola, que han servido para su proyecto Pixel.

Sony Ericsson

Nacida en 2001 como una joint venture del gigante Sony con la firma sueca Ericcson, los teléfonos de SE tuvieron pujanza y fueron punteros hasta 2012, cuando aún ocupaban la cuarta plaza de la cuota de mercado. Hoy opera únicamente bajo la firma de Sony, que sigue lanzando su Xperia con mucha menos pujanza.

Siemens

Historia de la telefonía móvil

La división mobile del gigante alemán acompañó la introducción de varias novedades a comienzos de siglo, como las pantallas a color o la inclusión de reproductores de MP3. Sin embargo, tras dar pérdidas y ser vendida como marca a la taiwanesa BenQ, Siemens dejó de producir teléfonos en 2005.

Rim/Blackberry

BlackBerry Curve

Fue un dispositivo que sin lugar a dudas marcó una época. En 2010 se calcula que eran 70 millones las personas que se comunicaban a partir del servicio de chat integrado con el que contaban estos dispositivos, marcados irremediablemente por su teclado expandido, pero la llegada de Whastapp marcó el inicio del fin de su valor fundamental. Actualmente está operada por la china TCL-

Por el camino han salido también trastabilladas antiguas marcas como la francesa Alcatel -que ahora opera en colaboración con la china TCL, al igual que BlackBerry, Panasonic, HTC o el rápido auge y caída de Microsoft Mobile y su Windows Phone, que no obstante sigue explorando el mercado en la actualiad -ahora con Android- en su gama Surface, con su propia apuesta en las pantallas duales.

Modelos y formatos: de los teléfonos 'concha' a los plegables, pasando por la revolución iPhone

Y no cabe duda que en este tiempo el principal cambio ha sido la migración del concepto 'teléfono móvil' a 'smartphone'. Un camino que se ha recorrido por medio de distintos formatos de teléfono, conceptos y factores de forma de los teléfonos.

De los Nokia iniciales, pasando por los primeros teléfonos plegables, 'de tapa', o de concha (como el mítico Motorola RAZR V3 de 2004 ahora reeditado con pantalla plegable, la propuesta con teclados QWERTY de Blackberry o los slide o desplegables que escondían el teclado bajo la pantalla hasta la evolución de las pantallas táctiles. El LG Prada de 2006 se considera el primer móvil con una pantalla táctil capacitiva, es decir, que no se guiaba por la presión sino que detectaba el toque de los dedos de forma electrónica. Un año después, la presentación del primer iPhone redondeaba esto con una pantalla que reconocía más de un impulso, y que permitía por ejemplo hacer zoom es las fotografías.

¿Recuerdas cuando podías usar el móvil con una sola mano?

Otros precedentes como el primer móvil comercial con cámara fue el J-SH04 de Sharp, aunque aún faltaría mucho para que la imagen fuera el centro de los smartphone. Con las pantallas táctiles asentadas y el auge de la imagen, la fotografía y el vídeo, desde 2010 los smartphones tendieron a hacerse cada vez más grandes hasta acuñarse el término phablet. Se dejó atrás el estándar de 4 pulgadas impulsado por el iPhone para dar paso a las 6-7 que se estilan actualmente en el mercado, con formatos como la 'gota' que fijó como tendencia el iPhone X y la casi desaparición de bordes, antes de dar el salto, si es que se acaba imponiendo, al formato plegable que empiezan a marcar fabricantes como Samsung con sus modelos Fold (y ahora Flip) o Huawei con el Mate X, presentados hace ahora justo un año en el Mobile World Congress de Barcelona.

En la tabla posterior que cierra nuestro recorrido por las dos últimas décadas del mercado de la telefonía móvil se pueden ver los modelos que más se han vendido por años (puedes ordenar la tabla según unidades vendidas, lanzamiento o fabricante). Un vistazo rápido que nos da una idea de la pujanza que tuvieron por ejemplo los Nokia 1100 y 1110 -cada uno con más de 250 millones de unidades vendidas- el iPhone 6 como punto de eclosión total de Apple a las masas -220 millones de ventas- o el punto diferencial que también marcó para Samsung el Galaxy S4 de 2013.