Apple por fin ha actualizado los dos Mac más necesitados de un aire fresco, el MacBook Air y el Mac mini. Ambos llegan con características más acordes a nuestra época, con los procesadores de octava generación de Intel y más opciones de memoria, rendimiento y –cómo no– también precio.
El Mac mini es una pequeña caja, una suerte de portátil sin pantalla ni batería que podemos conectar a nuestro monitor y periféricos favoritos, tal y como con el resto de 'torres' o alternativas con Windows. Esto es lo que se conoce como un SFF –de Small Form Factor, o pequeño factor de forma– en el mundo de los builders de PC.
Qué me llevo en el Mac mini
Recordemos que el nuevo Mac mini llega con procesador de escritorio, a diferencia del modelo de hace ya cuatro años. En aquel veíamos procesadores de doble núcleo en su variante 'U', o para portátiles, con potencias desde los 15 a los 28 vatios. En el nuevo Mac mini vemos procesadores de escritorio al completo, en configuraciones de cuatro a seis núcleos que suben hasta los 65 W de potencia de 2018.
Antes de entrar en mayor detalle, veamos qué nos llevamos o qué podemos llevarnos si configuramos un Mac mini:
- Procesador: 8ª generación Intel Core
- i3 de cuatro núcleos a 3,6 GHz
- i5 de seis núcleos a 3 GHz (Turbo Boost: 4,1 GHz)
- i7 de seis núcleos a 3,2 GHz (Turbo Boost: 4,6 GHz)
- Gráficos: Intel UHD Graphics 630
- Sin gráficos dedicados, pero compatible con eGPU
- RAM: 8, 16, 32 o 64 GB DRR4 a 2666 MHz
- SSD: 128, 256, 512 GB, 1, 2 TB PCIe
- Conectividad: Wi-Fi 802.11ac y Bluetooth 5.0
- Ethernet: 1 GbE o 10 GbE
- Puertos: cuatro Thunderbolt 3, 1 jack de 3.5 mm, 2 USB 3.0 (A), HDMI 2.0
- Alimentación: fuente interna, 150 W
- Dimensiones: 19,7 x 19,7 cm, 3.6 cm de grosor y 1,3 kg
- Sistema: macOS Mojave
Por el momento, no está claro si componentes como la RAM o el almacenamiento interno serán accesibles para su ampliación por el propio usuario. A la vista de la trayectoria de Apple, apostaría a que no, especialmente en la parte de almacenamiento.
Ahora veamos, de más a menos sencillez, cómo podemos conseguir tener un Mac mini con Windows o Linux.
Mini PC y barebones
Los mini PC son alternativas cada vez más interesantes por la facilidad de instalación, la versatilidad que dan y el poco espacio que requieren. Muchos son ampliables y configurables con distintas cantidades de memoria. Los barebones son ordenadores casi listos para funcionar, que habitualmente se distribuyen con lo justo: carcasa y CPU. Dejan así que seas tú mismo quien termine por completar el sistema con memoria RAM y disco duro.
Lo mínimo: Intel Compute Stick y cía.
Sí, el primero ya viene con trampa. No se trata de un ordenador de la categoría del Mac mini, pero si estás aquí es porque buscas un ordenador muy compacto que cumpla para ciertas tareas. Si estas son básicas –aunque no tanto–, y no necesitas demasiada ampliación vía periféricos, quizás te interesen los ordenadores en formato 'pendrive' de Intel.
Se trata de pequeños sistemas con procesador Intel de bajo consumo que van desde la línea Atom hasta la línea Core m5 y equipan de 2 a 4 GB de memoria RAM. Parten de 32 o 64 GB de almacenamiento interno, aunque este puede ser ampliado con tarjetas micro SD. A cambio, su precio también puede ser muy contenido: parten de poco más de 140 euros, y aunque llegan hasta los 480 esta configuración se hace cara. Asus también tiene su oferta en este sentido, los Vivostick disponibles desde unos 130 euros.
Intel NUC, de menos a más
Pero Intel no se queda ahí y sube la apuesta en formatos mucho más similares a lo que hemos venido a imitar aquí. Se trata de sus famosos 'NUC', en los que hay varias gamas según rendimiento.
- Intel NUC básicos. Se trata de pequeñas cajas algo menores que el Mac mini, aunque también más altas, dependiendo del modelo. Aunque se presentaron con procesadores de la octava generación en agosto, todavía no están disponibles. Podemos encontrarlos con RAM y SSD preinstalado desde unos 500 euros con procesador i3 de línea U (15 W) hasta los 940 euros un i7 similar (28 W). Puedes explorar todos los modelos disponibles en SimplyNUC. Sus características principales:
- Hasta Core i7 de doble núcleo y séptima generación, octava todavía no disponible
- Gráficos hasta Iris Plus 650,
- Hasta 32 GB de RAM DDR4
- SSD PCIe M.2 primario (hasta 2 TB) y ampliación con SSD de 2.5"
- Wi-Fi ac
- Thunderbolt 3 (en modelos i5 e i7), HDMI 2.0, USB 3
- Próxima generación llegará con gráficos AMD Radeon 540 a bordo.
- NUC avanzados: Hades Canyon, con gráficos Radeon dedicados en el propio chip. Es el mini PC más potente de Intel y uno de los más interesantes si lo que buscamos es un rendimiento excepcional, cuenta con procesadores de la octava generación en su última versión 'Hades Canyon', un montón de conectores y los podemos encontrar por 799 euros o 979 euros según la versión. Ten en cuenta que has de añadirle la RAM y la memoria en formato M.2. Sus características más relevantes:
- i7 de cuatro núcleos
- Radeon RX Vega M GH o Vega M GL
- Hasta 32 GB de RAM
- Hasta dos SSD formato M.2
- Dos Thunderbolt 3 y varios puertos USB 3.0 y 3.1 (tanto USB A como USB C), dos HDMI, dos mini DisplayPort, lector SD y jack de 3,5 mm
'Mini PC' de terceros
Por supuesto, no tiene por qué ser de Intel. En general, los fabricantes más conocidos de componentes ensambladores de equipos también tienen sus variantes. Mencionemos los más relevantes:
- MSI: Cubi 3 para lo básico, Trident 3 para todo. En la línea del catálogo anterior, este conocido fabricante tiene el Cubi 3 desde configuraciones i3 por 299 euros, a las que tendríamos que añadirle la RAM (hasta 32GB) y el disco duro. El Trident 3 incluye procesador i5 o i7 de escritorio de última generación, gráfica dedicada (soldada) compatible con un rendimiento más serio. Puedes encontrarlo desde 799 euros.
- Lenovo ThinkCentre M920 Tiny, o lo que es lo mismo, un ordenador del tamaño de un Mac mini también con los últimos procesadores de escritorio de Intel. Estos parten, desde 479 euros para el i3 con 4 GB de RAM, pudiendose ampliar hasta 32 GB y tiene ranura para SSD PCIe en formato M.2.
- Gigabyte Brix s. Veteranos en los 'mini PC' son también Gigabyte con su línea Brix. Los más potentes Brix s parten de 360 euros con i3 de octava generación pero bajo consumo y llegan a los 529 euros si nos vamos al i7, RAM y almacenamiento van a parte.
- Opciones de Asus:
- Vivo mini y PN 40. Similar a los NUC de Intel, formato muy reducido y procesadores de bajo consumo (U), con varias oociones de almacenamiento: M2 y discos de 2,5".
- Mini PC PB60. Procesadores de escritorio de algo menor consumo en tamaño ligeramente inferior al Mac mini. Se mueve entre los 675 euros para el i3 y los 1.180 euros para el i7. Memorias ampliables, con ranura para SSD M.2, y diseño modular.
- ROG GR8 II. Si no te importa la estética, podemos subir algo más el tamaño y el rendimiento para incluir una GPU dedicada, que en este tipo de sistemas suele venir soldada. Tienes varias opciones, de i5 a i7, un ejemplo es la que viene con la gráfica de escritorio GTX 1060 y 16 GB de RAM por 1.379 euros.
- Opciones de HP:
- HP Elite Slice. La oferta modular de HP cuenta también con procesadores de escritorio –de hace dos años, eso sí–, y configuraciones que parten de 4 GB de RAM y 500 GB de disco. Disponible por 901 euros.
- HP ProDesk y EliteDesk G4. Son configuraciones con distintas dimensiones. Una de las más interesantes incluye 8 GB de RAM, 256 GB de disco SSD y procesador i5 de la última generación. Está disponible por unos 780 euros
- Workstation Z2 Mini G3. Se acerca a los 2.000 euros, pero incluye procesador de la línea Xeon E3 de cuatro núcleos y gráfica profesional Nvidia Quadro M620, parte de 256 GB de SSD.
- Dell es otro de los grandes con presencia en mini PC con sus OptiPlex. Tienen varias gamas, en función del rendimiento esperado, con la octava generación de procesadores Intel:
- OptiPlex Micro 3050 parten de los 420 euros 4 GB y procesadores Pentium, i3 o i5.
- OptiPlex Micro 5060 parten de los 820 euros con procesador i3 o i5 y configuraciones de memoria de hasta 8 GB o 256 GB de SSD.
- OptiPlex Micro 7060 parten de los 830 euros con procesador i5 o i7 y configuraciones de 8 o 16 GB de RAM y 128 o 256 GB de SSD.
Como vemos, es relativamente fácil encontrar propuestas de PC completo en formato reducido. No tanto encontrar equipos algo más ambiciosos que no se vayan a un tamaño más difícil de encajar en un rincón del escritorio. Aunque también hay alguno, los precios suben. Por lo general además tenemos opción a ampliar la RAM con módulos SO-DIMM –los pequeños– y la memoria con un SSD de 2.5" o bien con un chip SSD en formato M.2.
Móntalo tu mismo
Salvo estas opciones de memoria, estos mini PC no permiten ampliar o renovar ninguno de sus componentes. Incluso los que traen tarjeta gráfica incorporada, esta suele ir soldada a la placa base de forma que no es sencillo cambiarla por una más competente pasados unos años. ¿Y si lo montaras tu mismo? Veamos cómo podemos hacer esto y qué nos llevamos a cambio.
La gran dificultad a la hora de conseguir asemejar una build al Mac mini en un PC montado con tus propias manos es el aprovechamiento del espacio. En los mini PC preconfigurados es más sencillo puesto que las piezas y los cables van a medida, también la fuente de alimentación y la placa base. Salvo las memorias, el resto va soldado. Cuando metamos los componentes en la caja esto no será así, y habrá que hacer espacio a unos cables más gruesos e innecesariamente largos. También hay más puertos en general, incluso algunos que probablemente nunca usarás, pero se ha estandarizado así y no parece que vaya a cambiar pronto.
El componente central del ordenador es la placa base. Dentro de los tamaños más o menos estandarizados hoy, el más pequeño es el formato mini ITX. Este es mucho más pequeño que el ATX –todavía de referencia en los PC por piezas– pero todavía marca un límite y fija el tamaño mínimo (17 x 17 cm solo esta pieza) que ha de tener nuestra creación. En él todavía podemos instalar los procesadores estándar de escritorio y cuenta con una ranura de expansión y dos para módulos de RAM de formato DIMM (los grandes), aunque la potencia total disipada vendrá limitada por el espacio con el que contemos en nuestra caja.
Por tanto, es hora de decidir qué caja queremos y si nos interesa tener –o simplemente dejarles espacio para el futuro– algún tipo de gráficos dedicados más potentes que los UHD Graphics 630 de los últimos chips de Intel. Es importante verificar que encajarán todas las piezas, así como el disipador y el ventilador de nuestra CPU. Podemos encontrar las medidas de cada componente en los manuales de la caja que elijamos.
Nosotros vamos a dejar a un lado la ampliación de gráficos y vamos a intentar aproximarnos simplemente a lo que ofrece el Mac mini. Para ello elegimos una caja como la Streacom F1CB. Podemos encontrarlas mucho más baratas. Al final la idea es encontrar una que te guste, convenga y sea compatible con el resto de componentes y estos entre sí, claro. Para ello podemos utilizar PcPartPicker, que nos echa una mano en el proceso de selección de piezas.
Una posibilidad, con multitud de puertos y similar al Mac mini más básico aunque con el doble de SSD (que llevaría al dispositivo de Apple a los 1.139 euros), sería la siguiente:
- Caja: Streacom F1CB, 138 euros
- Placa base: Asus Rog Strix Z370I, con WiFi ac, por 219 euros
- Procesador: Intel i3 8100, 146 euros
- RAM: HyperX Fury 8 GB en una ranura, dejando la segunda libre para futura ampliación, 72 euros
- SSD: Samsung 970 EVO 250 GB, 87 euros
- Fuente de alimentación: Fuente externa Streacom Nano 160, 107 euros
- Sistema operativo: Windows 10, desde 10 euros
- Total: 779 euros
Aunque más barata, esta configuración es bastante más tosca que la de Apple, por no mencionar que la fuente de alimentación es en este caso externa, en el cable. Mide los mismos 19,7 x 19,7 cm de planta, pero es considerablemente más alta: 7.7 cm frente a los 3.6 del Mac mini. Además, la antena Wi-Fi será externa. Como ventaja, una vez montada podemos modificarla de varias formas:
- Cambiando el procesador por otro más potente, a mayor frecuencia, con más núcleos o hilos lógicos. Tan fácil como abrir, la caja y cambiar uno por otro.
- Ampliar la RAM. Este PC es compatible con hasta 32 GB de RAM, simplemente añade otro módulo en el hueco que dejaste.
- Añadir un disco duro –o dos, o tres– más rápido, o más grande, cuando el anterior se te haya quedado pequeño. En esta configuración puedes añadir hasta tres de 2,5".
- Mejora la ventilación. Puedes cambiar el ventilador de serie por otro más potente o silencioso. Por ejemplo, podemos sustituir el que viene de serie por el Noctua
Al haber elegido una buena placa base con chipset Z370 de Intel –y también una buena cantidad de puertos– es compatible también con los procesadores de la novena generación de Intel. Por tanto vamos a intentar ahora esta misma configuración algo más potente, pero con un i7 de última generación y algo más de memoria:
- Procesador: Intel Core i7 9700K de 8 núcleos y 8 hilos a 3,6/5,0 GHz, 577 euros
- RAM: HyperX Fury 16 GB de RAM en dos ranuras (8 + 8 GB), 144 euros
- SSD: Samsung 970 EVO de 1 TB, 280 euros
- Ventilador: Noctua NH L9i, 40 euros
- Total del equipo: 1.515 euros
Es posible que una vez en pruebas el ventilador no sea capaz de disipar toda la energía de forma muy intensiva y sostenida, y mucho menos soportar el desbloqueo del multiplicador (overclock) del que es capaz tanto la placa base como la CPU elegida. Una solución sería ajustarlo a las velocidades máximas algo inferiores, y similares a las que vemos en el modelo más exigente de Apple. Otra opción es recurrir al chip i7 8700, ahorrando casi 190 euros por el camino.
Una configuración similar para el Mac mini, con el procesador equivalente pero en la versión de 2017, quedaría de la siguiente forma:
- Procesador: Intel Core i7 8700B de 6 núcleos y 12 hilos a 3,2/4,7 GHz, +240 euros
- RAM: 16 GB de RAM, +240 euros
- SSD: 1 TB, +720 euros
- Total del equipo: 2.449 euros
Vemos que es posible 'ahorrar' cerca de mil euros en una configuración algo exigente pero sin ir a máximos de lo que nos ofrece Apple en expansión de memoria. Tiene sus iconvenientes, claro. Ni este PC es tan 'mini' como la alternativa de Apple, ni nos lo dan todo montado, ni está exento de las pruebas que tengamos que hacer para dejarlo a punto. Además, la antena para el WiFI será externa.
Aun así, es interesante ver que todavía podemos montar nosotros mismos un equipo relativamente reducido y ambicioso. Sin embargo, el sabor final es algo agridulce, al ver que los estándares de componentes (cables muy gruesos, conectores toscos) están algo desfasados a estas alturas y no permiten aprovechar más todavía el espacio dentro de las cajas.