Parecía cosa del pasado, una moda que tuvo su punto álgido en 2015, pero la realidad es que sigue a la orden del día. Unos productos que nacieron en los 80 y los 90, pero que supieron reconvertirse a las necesidades de los nuevos tiempos, y siguen captando la atención también de los inversores.
Comida en polvo, o también en barritas, que funcionan como sustitutos directos de una comida completa. El más famoso de todos, Jimmy Joy y anteriormente conocido como Joylent, ya ocupó la atención de los medios. Una versión europea del norteamericano Soylent que se puso de moda en algunas comunidades preocupadas por el consumo de comida basura y por la falta de tiempo para invertir en la cocina. Nuevas costumbres que han traído consigo el hecho de relegar la comida a un segundo plano. Los polvos no eran suficientes, o la idea de masticas se antojaba necesaria, y pronto llegaron la barritas con sus mismas características. Pronto, las startups dedicadas a esta actividad empezaron a salir una tras otra: Queal, MealSquares o SlimFast son solo algunas de las más populares.
Me he alimentado únicamente con Joylent durante 30 días, esta es mi experiencia
A la lista se une otra de origen europeo, concretamente francés, que busca extenderse al mercado internacional. Es decir, a Estados Unidos. Feed comenzó con alimentos con base en polvo veganos, sin gluten y sin lactosa. A día de hoy ya ha vendido 1 millón de kg de polvos para la alimentación, lo que equivale a 6,5 millones de botellas. Traducido a ingresos, esto representa unas previsiones de 11,6 millones de dólares en 2018 que han llamado la atención de los inversores. En un mundo de emprendedores en el que no solo se pueden hacer aplicaciones y los inversores cada vez afrontan nichos más especializados. Alven y Otium Brands han decidido invertir 15 millones de euros en Feed en su primera ronda de financiación. Una inversión que, en términos generales, supera la media de la inversión en casi cualquier startup española, con las excepciones de las últimas semanas.
Concebidos como sustitutos de algunas comidas para aquellos que carecen de tiempo o no quieren engordar, pese a que no sea un producto de dieta, uno de los puntos fuertes es la comunidad de fieles seguidores que han generado a su alrededor. Un sistema de conexión con los mismos que ha interesado a los inversores de la compañía en cuanto al futuro de la misma.