Los bots en Twitter fueron parte del modus operandi que utilizó Rusia para influir en las elecciones de Estados Unidos. Después del escándalo de Russiagate y de la injerencia del Kremlin en varios procesos electorales, un nuevo estudio ha confirmado que los bots tuvieron un efecto en el resultado del Brexit y de los comicios que dieron la victoria a Donald Trump.
Las cuentas falsas y la suplantación de identidad fueron algunos de los métodos utilizados en redes sociales. En el caso específico de Twitter, los mensajes automatizados jugaron un papel importante en este sentido, según el informe de la Oficina Nacional de Investigación Económica.
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Las elecciones de Estados Unidos de 2016 fueron uno de los objetivos de los rusos que formaron parte de la estrategia para interferir en el resultado final de las votaciones que convirtieron a Trump en presidente. Los bots de Twitter habrían ayudado al magnate a conseguir 3.23 puntos porcentuales de voto adicionales.
Meses después de que el Russiagate saliera a la luz, se confirmó que el Brexit fue otro de los procesos escogidos para desestabilizar la política en la región a través de las redes sociales. En este caso, los mensajes automatizados sumaron 1.76 porcentuales al voto a favor de que Reino Unido abandonara la Unión Europea.
"Nuestros resultados sugieren que, dados los estrechos márgenes de victorias en cada voto, el efecto de los robots probablemente fue marginal, pero posiblemente lo suficientemente grande como para afectar en los resultados", explicaron los autores del estudio, Yuriy Gorodnichenko de la Universidad de California en Berkeley, Tho Pham y Oleksandr Talavera, de la Universidad británica de Swansea.
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La información manejada por la Oficina Nacional de Investigación Económica arroja que los bots habrían tenido una mayor influencia en aquellos votantes que ya tenían una opinión forjada. En el caso de Trump, sus seguidores habrían difundido y reaccionado antes a los bots sobre el por aquel entonces candidato que las personas que no estaban de acuerdo con sus políticas. Estos mensajes también tuvieron una respuesta rápida y los bots se habrían compartido en la red social entre 50 y 70 minutos después de que fueran publicados.
El presidente de Estados Unidos ha negado que tanto él como su equipo de campaña tuvieran una relación con los rusos que llevaron a cabo estas prácticas. Su argumento principal para explicar su victoria es simplemente que sus estrategias políticas fueron más inteligentes que las de su rival Hillary Clinton.
Para poder recopilar estos datos, los investigadores que realizaron el estudio utilizaron la interfaz de programación de aplicaciones de transmisión de Twitter, que permite obtener detalles de tweets con características especiales en tiempo real. Para identificar los bots, los responsables del informe tuvieron en cuenta aspectos como las repetidas publicaciones de los mismos tweets una y otra vez.
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"Estas dos campañas y los debates posteriores sobre el papel de los bots en la configuración de las campañas plantean una serie de preguntas sobre si los diseñadores de políticas deberían considerar mecanismos para evitar el abuso de bots en el futuro", agregaron los investigadores.
El problema de los bots no es algo nuevo para Twitter. Este tipo de mensajes han sido utilizados en varias ocasiones por usuarios para enviar amenazas o insultos a otras personas. Twitter puso en marcha algunas medidas para frenar el auge de los bots en la plataforma pero este estudio pone de relieve su poder para influir, aunque no fuera de manera masiva, en procesos electorales.