El buque insignia de Xiaomi se renueva. La gama MIX, que comenzó como un concepto algo alocado y sin muchas perspectivas de futuro, recibe con todos los honores a la tercera generación, la que por fin pretende aupar a la marca y situarla en lo más alto. Su predecesor, el Mi MIX 2, carecía de muchas de las cualidades que permiten a un smartphone adentrarse en lo más profundo de la gama alta, así que la pregunta resulta obvia: ¿consigue subsanar el Mi MIX 2S en esta revisión los errores del pasado para suponer una apuesta en firme y, sobre todo, para conseguir conquistar la cartera de los usuarios?Xiaomi es la empresa de la que todos hablan. Su llegada a España de manera oficial el pasado año, que conforma el primer destino europeo de la marca, ha sido recibida con entusiasmo por unos consumidores que encuentran en su oferta productos de calidad a un precio más contenido que el de otras empresas del sector más asentadas. Poco a poco ha ido haciéndose un nombre en las gamas baja y media, pero sigue cojeando en el terreno más competitivo, donde la rivalidad es absoluta y los grandes del sector no ceden terreno tan fácilmente.
2018 es un año muy importante para la expansión futura de Xiaomi y ellos lo saben, por eso querían empezarlo con una carta de presentación donde las virtudes fueran muchas –como lo son el Mi MIX 2S– y la mediocridad no hiciera acto de presencia –como sí lo hacía en determinadas competencias del Mi MIX 2–. La solución ha sido lanzar una versión "S" que, como ya acostumbramos a ver en la industria de telefonía, supone una mejora más interna que externa y cuya finalidad es la pulir y abrillantar más que la de imaginar todo de nuevo.
Y así es, en líneas generales, el nuevo buque insignia de Xiaomi. Una versión del anterior que ha pasado por el taller de customización para darse un lavado de cara con el que enfrentarse al mercado durante un año más hasta la llegada de una renovación más profunda –se presupone– con el siguiente modelo. La evolución sin revolución que tan bien aplica a muchos de los smartphones presentados en los últimos meses (véase el Galaxy S9). Pero vamos al grano.
Este teléfono te va a gustar
Exteriormente el Xiaomi Mi MIX 2S es un teléfono que no ha cambiado, como decía, en casi nada. Uno es incapaz de distinguirlo del anterior si lo mira frontalmente, pudiendo darse cuenta de que es la nueva versión únicamente al voltearlo y encontrar esa doble cámara que se hace obligatoria en todo gama alta que se precie. No sin mi bokeh.
Mantener el diseño de una generación a otra (aunque en este caso ya es la segunda vez que ocurre, pues la apariencia del MIX original y la este no distan demasiado), duramente criticado en otras ocasiones, es todo un acierto por parte de Xiaomi por la sencilla razón de que es la singularidad lo que de verdad hace destacar a este terminal. Las especificaciones son importantes, claro, pero un momento en el que todos los dispositivos parecen seguir un patrón común –¿quién dijo notch?– es un oasis ver un smartphone como el Mi MIX 2S en términos de singularidad referentes al formato o al cuerpo cerámico, por ejemplo.
El concepto MIX ya me tenía ganado desde el predecesor del que hoy es objeto de análisis, siendo esta una confirmación de que el formato de pantalla amplia y sin interrupciones visuales en la parte superior es un acierto para un buen puñado de escenarios del uso diario. Si las grandes dimensiones o los selfies no son un hándicap para ti, este teléfono te va a gustar.
Sus 5,99 pulgadas de pantalla ofrecen una de las experiencias más cercanas a un teléfono sin marcos que se pueden disfrutar hoy en día, quedando el marco inferior más o menos fuera de la vista cuando se tiene en mano gracias a su ubicación inferior. En cuanto al panel en sí, decir que por el momento no se atreve a sumarse a la creciente tendencia OLED de los gama alta y que mantiene un agradable formato de 18:9.
Mi MIX 2S en el día a día
En el día a día de uso es donde de verdad se demuestra si las especificaciones que el fabricante monta hacen justicia a la pompa y la fanfarria con la que, en este caso, han sido presentadas. Xiaomi incorpora en el Mi MIX 2S el nuevo Snapdragon 845 de Qualcomm, 8 GB de memoria RAM y 256 GB de almacenamiento interno a los que, en pocas palabras, es difícil poner pegas. El desempeño del terminal bajo estas premisas es realmente bueno y, si no fuera por el inconveniente de que la versión que he podido probar aún cuenta con una variante no definitiva del software donde los pequeños errores son frecuentes (además de no estar presentes características como el desbloqueo facial y ciertos detalles en la cámara, que veremos más adelante), sería excelente.
Si hablamos de software es necesario mencionar que viene, como no podía ser de otra manera, con la capa de personalización propia de Xiaomi MIUI, la cual está muy bien conseguida y dista mucho de experiencias como la que ofrecen fabricantes de la talla de Huawei con EMUI. La marca incluye ahora en su novena versión una interfaz por gestos cuyo origen es fácil de dilucidar, permitiendo salir de aplicaciones realizando un deslizamiento hacia arriba, abrir la multitarea realizando el mismo gesto más lentamente o volver hacia atrás mediante un gesto deslizante lateral desde el marco izquierdo o derecho de la pantalla. El centro de notificaciones y ajustes rápidos es accesible mediante un desliz hacia abajo desde cualquier parte de la pantalla para evitar hacer malabarismos con una mano hasta alcanzar el borde superior. Huelga decir que todo esto facilita enormemente la navegación y, mientras esto sea así, bienvenido sea.
Mención especial requiere la batería del terminal, que opta por mantenerse en los 3.400 mAh y podría haberse mejorado, ciertamente. El rendimiento no es malo y aguantará el día si no se le exige demasiado, pero tanto por dimensiones como por especificaciones cabría esperar un incremento de la misma. Ahora viene también con carga rápida y también opción inalámbrica, como manda la normal para el curso presente.
La experiencia diaria con el Mi MIX 2S es, en esencia, bastante mejor a lo que ya pudimos encontrar en la anterior versión y, ahora sí, deja claro que la gama alta es una prioridad para la compañía, poniendo los ingredientes necesarios para apartarse del tortuoso camino que puede ser en ocasiones hacer casar interfaces, sistema operativo y especificaciones. Pero hablar de experiencia en el Mi MIX 2S sin hablar de la cámara no es posible, pues este es uno de los ejes sobre los que se cimenta el cambio generacional.
Mejor, mucho mejor
Mejorar la cámara del Mi MIX 2S, no vamos a llevarnos a engaño, no era una empresa complicada. La experiencia fotográfica que ofrecía el Mi MIX 2 como gama alta era, de lejos, lo peor que podíamos encontrar en el teléfono si hablamos en términos de competir con los grandes del sector. Era incluso superado por el Mi A1, que no por ser excelente deja de ser un gama media. Y es que puedes tener buenas características, o aceptables, que si falla la cámara no hay quien consiga justificar la compra de un buque insignia hoy por hoy.
Los teléfonos se han convertido en la cámara de fotos por excelencia de millones de personas y, por fin, Xiaomi ha comprendido que había que hacer hincapié en este aspecto. La doble cámara con Dual Pixel y telefoto no es un alarde de genialidad ni derroche de ingeniería por su parte, pero al menos ya es una que se desenvuelve con soltura y permite hacer alguna que otra virguería en forma de modo retrato o zoom 2x sin pérdida de calidad y, cuando llegue el software final, también jugar con los fondos para obtener resultados más llamativos.
https://i.hipertextual.com/2018/04/05/IMG_20180327_152932.jpg
https://i.hipertextual.com/2018/04/05/IMG_20180328_182551.jpg
https://i.hipertextual.com/2018/04/05/IMG_20180328_112459.jpg
https://i.hipertextual.com/2018/04/05/IMG_20180328_110749.jpg
https://i.hipertextual.com/2018/04/05/IMG_20180328_125750.jpg
https://cdn.knightlab.com/libs/juxtapose/latest/embed/index.html?uid=aaed5d20-38c2-11e8-b263-0edaf8f81e27
Puedes ver estas y otras fotografías a tamaño completo en este álbum.
Los resultados en escenas de baja luz son especialmente buenos en esta ocasión, especialmente si se tiene activado el modo de inteligencia artificial (que, curiosamente, aquí sí funciona a través de un icono en la parte superior de la aplicación de cámara que, en mi opinión, debería permanecer siempre funcionando). En ocasiones sigue siendo complicado captar detalle y, por alguna razón, los bordes tienden a suavizarse con más frecuencia de lo que a uno le gustaría. A pesar de esto, la reproducción de color es fiel y, en general, el comportamiento es correcto.
Siempre hay margen de mejora, más aún con las últimas novedades del sector, pero Xiaomi ya juega sobre seguro con esta cámara trasera para contentar al grueso de usuarios. No se puede decir lo mismo de la frontal, que permanece sin variación y nos habría gustado ver también mejorada. Nuevamente, es de esperar que lo referente a la cámara mejore en parte con la llegada de la versión final del software –tanto en la toma de fotos como en la aplicación de efectos, como el modo retrato con la cámara frontal, que no está disponible, o el desenfoque creativo de fondos–, en cuyo caso actualizaremos este análisis.
Conclusión
El Xiaomi Mi MIX 2S es el teléfono que tendría que haber sido en un principio el Mi MIX 2. Ahora que muchos de sus puntos débiles han quedado solventados, resulta especialmente atractivo tanto en términos estéticos como de especificaciones. Hay margen de mejora, por supuesto, pero ya es un dispositivo que no me importaría usar a diario porque, si tuviera que pasar una larga temporada con él, sé que va a rendir de manera adecuada.
Volveré a decir las veces que haga falta que es grato ver terminales que se atreven a hacer las cosas de una manera diferente al resto de fabricantes, ya sea Apple con el notch o Xiaomi con el no notch. Quedo a expensas de una versión final que corrija los errores que se experimentan en el día a día con el dispositivo y que, aun a sabiendas de ello, es inevitable que empañe el uso.
Pros
- Diseño
- Interfaz por gestos
- Especificaciones inmejorables
Contras
- Cámara frontal de baja calidad
- Batería escasa para usos intensivos