Raras son las ocasiones en las que empresas españolas dedicadas al negocio de los videojuegos llaman la atención y ocupan algo de espacio en el territorio informativo. Pero en este caso, la española PlayGiga lo ha conseguido. La startup fundada por César Valencia, con experiencia en la producción de videojuegos para grandes compañías internacionales, y el ex-directivo de Telefónica, Juan Gili, ha levantado 5 millones de euros de financiación, como informa Loogic, por parte de las firmas de venture capital Adara Ventures, Caixa Capital Risc, Inveready y Bankinter.
Para PlayGiga el cloud gaming es el futuro de los videojuegos
Algunos han definido a la empresa, afincada en Madrid, como el Netflix o el Spotify de los videojuegos. En cualquier caso, lo que hace Playgiga es ofrecer una plataforma para el uso de videojuegos por streaming y bajo demanda para jugar desde cualquier dispositivo conectado a Internet sin necesidad de descargas ni instalaciones, simplemente utilizando la nube, en la que los juegos se procesan y renderizan en tiempo real y con una calidad de reproducción de 60 fps y a una resolución desde 720p a 1080p. El catálogo, que hasta el momento no se conoce, y la forma de pago son decisiones de las propias operadoras; al final, PlayGiga se posiciona entre estas y las productoras de videojuegos, con las que la compañía tiene acuerdos de distribución, ofreciendo la tecnología para poder acceder a los títulos, el elemento más atractivo para los jugadores.
PlayGiga, que nació en 2013, ha visto en el negocio del **cloud gaming el futuro del desarrollo de este sector, además de la internacionalización, para ellos la forma más sensata para garantizar el crecimiento y objetivo por el cual han recaudado los fondos. La compañía está presente en España y Portugal, y recientemente ha hecho un acuerdo con la china Innoplay con el objetivo de entrar en el continente asiático. Tampoco descartan entrar en Latinoamérica.
De todas formas, PlayGiga, aunque ha conseguido posicionarse con éxito, no es la primera en ofrecer estos servicios**. OnLive nació con el mismo objetivo pero terminó siendo comprada por Sony, la cual, tras quedarse con toda su tecnología y 140 importantes patentes, terminó echando el cierre de la compañía para después utilizarlas para lanzar el servicio PlayStation Now.