Desde un rincón del Museo Louvre de París, el famoso cuadro de la Mona Lisa nos observa impertérrito. La conocida como la "sonrisa misteriosa" de Leonardo Da Vinci ha aguantado el paso del tiempo, a pesar de la afluencia diaria de turistas que busca encontrar alguno de sus secretos pintados en este lienzo.

La Mona Lisa, obra más conocida como La Gioconda, fue un cuadro pintado por Da Vinci entre 1503 y 1519, y adquirido posteriormente por el rey Francisco I. Actualmente se cree que representa a la mujer de Francesco Bartolomeo de Giocondo, cuyo nombre real era Lisa Gherardini.

¿Pero cómo saber más sobre los secretos de este cuadro? ¿Necesitamos acaso de más análisis pictóricos para conocer la identidad de esta mujer? Ciencia y arte se han unido ahora en una bonita iniciativa de investigadores italianos, que pretende averiguar más datos sobre la intrigante Mona Lisa analizando el genoma de la modelo, Lisa Gherardini.Analizarán el ADN de restos óseos para averiguar si pertenecían a la modelo

En este proyecto, los científicos pretenden secuenciar el ADN de restos óseos que podrían haber pertenecido a la Mona Lisa de la vida real. El proyecto, liderado por Silvano Vinceti, comparará las secuencias genéticas de estos huesos con el ADN de parientes confirmados de la Mona Lisa, que se encuentran enterrados en la Basilica Santissima Annunziata de Florencia.

Si todo va bien, y se lograra confirmar que los restos óseos pertenecen a la Mona Lisa, el proyecto de Vinceti iría un paso más allá, realizando la reconstrucción facial de la modelo a partir de herramientas computacionales. Aunque el rostro no sería completamente exacto, la secuencia del genoma humano que se tuviera serviría para ver, primitivamente, la sonrisa misteriosa de la mujer que pintó Da Vinci.