Microsoft Remote Desktop ha dado el salto a iOS y Android. La popular herramienta de Microsoft para acceder a Windows a distancia y que estaba disponible para Windows y OS X, se abre paso también a los dispositivos móviles de Google y Apple para que controles Windows desde una pantalla táctil. Ya hemos visto algunas aplicaciones de control remoto de Windows desde Android e incluso desde el navegador a través de Google Hangouts. A continuación veremos cómo sacarle partido a Microsoft Remote Desktop, la herramienta de control remoto de Windows para dispositivos iOS y Android.

Para empezar, hay que destacar que Microsoft Remote Desktop es una aplicación gratuita. El único requisito es tener un dispositivo iOS compatible con la versión 6.0 o un dispositivo Android con la versión 2.2 o superior. En ambos casos, puedes hacer uso de teléfono o tableta. En este sentido, te será más práctico usar una tablet o un iPad, ya que con el mayor tamaño de pantalla podrás gestionar mejor el control remoto de Windows viendo el escritorio al completo.

¿Cómo configurar Microsoft Remote Desktop?

Para realizar un control remoto de Windows desde iOS o Android, necesitarás, en primer lugar, instalar Microsoft Remote Desktop en el dispositivo móvil que servirá de cliente, es decir de punto desde el que acceder a tu Windows, que puede ser XP, Vista, 7 u 8.

control remoto de Windows

El siguiente paso es configurar Windows para que permita la conexión. Para ello, desde Windows Vista/7, accede a Panel de Control, busca "remoto" y encontrarás, dentro de la categoría "Sistema", la opción "Permitir el acceso remoto al equipo". Desde Windows 8, encontrarás esta opción buscando directamente con el buscador integrado en el sistema. En la ventana que se abrirá podrás configurar la conexión, con dos niveles de seguridad, en función de la importancia de los archivos que tengas en tu equipo. Por ejemplo, si realizas la conexión en casa, puedes optar por la opción menos segura pero más sencilla, pero si conectas en el trabajo, tal vez debas usar la opción más segura.

Una vez tenemos configurado Windows para permitirnos la conexión, ahora tendremos que crear la conexión propiamente dicha desde Microsoft Remote Desktop. Para ello, tan sólo hay que abrir la aplicación, indicar "New Remote Desktop" y configurar principalmente los campos "PC name" con la IP del PC** al que vamos a acceder (la encontrarás con el comando "ipconfig" desde la línea de comandos o "Símbolo de sistema") y un usuario que hayamos creado para tal uso en Windows.

¿Qué ofrece Microsoft Remote Desktop??

La principal ventaja de Microsoft Remote Desktop es el absoluto control del ordenador al que accedamos. Además, podemos configurar dos o más escritorios remotos en caso que trabajaremos con distintos equipos. Aprovechando la pantalla táctil, podremos emular el ratón y el teclado virtual y acceder a todas las opciones disponibles. Por otro lado, en todo momento obtenemos información sobre el equipo al que hemos conectado, como si está conectado a la corriente (en el caso de un portátil), así como la lista de aplicaciones abiertas para acceder a ellas de forma más rápida, en especial en Windows 8.

A nivel técnico, Microsoft Remote Desktop ofrece soporte para sus propios estándares, como Remote Desktop Gateway o RD Gateway, Remote Desktop Procotol (RDP) o RemoteFX, estos dos últimos permitiendo control multigesto en Windows 8 a través de la pantalla del dispositivo iOS y Android.

La conexión es muy fluida, teniendo en cuenta las limitaciones de la conexión a Internet. Obviamente hay un retraso de unos segundos al ejecutar cierta orden o al abrir una aplicación, pero el resultado es más que aceptable si contamos con WiFi en el dispositivo iOS/Android y una buena conexión en el PC con Windows. Es más, el propósito de Microsoft Remote Desktop es gestionar ordenadores a distancia, con lo que el ahorro de desplazamiento físico es siempre un factor positivo.

En definitiva, Microsoft Remote Desktop te será muy útil para gestionar varios ordenadores desde tu dispositivo iOS/Android en caso de ser administrador de sistemas o responsable de IT, ya que puedes controlar el equipo como si estuvieras delante de él. Por otro lado, a nivel personal, puedes aprovechar esta herramienta de control remoto de Windows para usar tu móvil o tablet a modo de mando a distancia para reproducir contenido en el televisor, si conectas el ordenador.