Introduces tu nuevo CD de música o película en DVD y te das cuenta de que algo no va bien. El disco no se reproduce o incluso tras utilizarlo correctamente no eres capaz de expulsarlo. No pierdas la calma, vamos a ver qué podemos hacer en estos casos.
Método tradicional: si es que el sistema ha sido capaz de leerlo, prueba de nuevo a expulsar el disco haciendo clic sobre el icono de expulsar del CD o DVD de la barra lateral en una venta del Finder o arrastrando la imagen del mismo que aparece en el Escritorio a la Papelera.
Expulsión en el arranque del equipo: mantén pulsado el botón izquierdo del ratón o trackpad mientras reinicias el equipo.
Utilidad de Discos: si el CD o DVD aparece en el panel de la izquierda, haz clic sobre el botón de expulsar.
Terminal: ejecuta el comando drutil eject para intentar de nuevo expulsar el disco de la unidad óptica interna o drutil eject external si utilizas una externa.
Código del sistema en el arranque: reinicia tu Mac y, después del tono de encendido, mantén pulsadas simultáneamente las teclas Comando + Opción + O + F. Una vez dentro ejecutaremos el comando eject cd. Funcione o no, para poder reiniciar desde ahí tendremos que ejecutar acto seguido el comando mac-boot.
Selección de disco en el arranque: reinicia tu Mac con la tecla Opción pulsada. Una vez nos aparezca la pantalla de selección de disco, escogeremos el CD o DVD en cuestión. Después, mientras se ejecuta, pulsaremos la tecla de Expulsar de nuestro teclado para intentar deshacernos de él.
Hasta aquí las alternativas que el propio sistema nos suministra para expulsar esos discos rebeldes que se niegan a dejar nuestros equipos. Si no has conseguido ningún resultado, es muy probable que se haya roto el expulsador físico, así que tendrías que llevar tu Mac a reparar.