Igual que ayer alababa el interés de algunas empresas en apostar por conceptos innovadores, hoy toca hablar de una de esas decisiones empresariales que se entienden poco. El caso es el siguiente: las cámaras de fotografía y vídeo de alta definición de hoy en día tienen necesidades de almacenamiento y velocidad fuera de lo normal, impensables hasta no hace demasiado tiempo. ¿Consecuencia? Tres de las grandes empresas de este sector, Sony, Nikon y SanDisk, se unen para proponer a la CompactFlash Association (una entidad que promueve el uso de CompactFlash) un nuevo estándar que permita ir más allá de las capacidades de los formatos de tarjetas de memoria actuales.

El estándar propuesto por el trío de gigantes como evolución de CompactFlash, vendría a cubrir las necesidades antes mencionadas, permitiendo una capacidad máxima de alamacenamiento de 2 TB, y consiguiendo velocidades de transferencia de hasta 500 MB/s gracias al uso de la interfaz PCI Express, de forma que sería posible almacenar rápidamente ráfagas contínuas de datos de imágenes en bruto (RAW). Para que nos hagamos una idea, la versión 6.0 del actual formato CompactFlash sólo permite transferencias a un máximo de 167 MB/s.

Sin duda, la mejora sería impresionante, aunque no sería compatible con el actual formato CompactFlash pues, de entrada, el tamaño de las tarjetas no sería igual. ¿Dónde está la pega, en mi opinión? Pues que proponer un formato de estas características no tiene mucho sentido cuando ya existe uno similar, SDXC. Los productos basados en SDXC que lanzan los distintos fabricantes están saliendo con cuentagotas, por lo que no veo en qué mejoraría la situación otro tipo de tarjeta más en el mercado.

La única mejora palpable del estándar propuesto por Sony, Nikon y SanDisk se refiere a la velocidad, ahí sí que no tendría rival. Pero no creo que esta sea razón suficiente para proponer un nuevo estándar cuando podrían perfectamente haber contribuido a la mejora de SDXC en futuras versiones, sin añadir un nuevo capítulo al aumento de la fragmentación de formatos.