Aunque la mayoría piense que LinkedIn es una red segura dado su carácter profesional y que no supone riesgo a nuestra privacidad (porque no subimos fotos estando de fiesta), hay algunos detalles relativos a la privacidad de nuestro perfil que debemos tener en cuenta. LinkedIn incluye, dentro del panel de configuración, una sección completa relativa a la Configuración de la privacidad la cual vale la pena revisar y dedicarle un poco de nuestro tiempo.
Para empezar, el panel de configuración de LinkedIn lo tenemos accesible en la esquina superior derecha de la página, tan sólo hay que pasar el puntero del ratón por nuestro nombre y se desplegará un menú con las opciones "Configuración" y "Cerrar Sesión". Al pulsar sobre "Configuración" llegaremos al panel de control completo. Desde ahí podremos controlar la configuración del perfil, las notificaciones que recibimos y, lo que nos interesa en esta ocasión, la configuración de la privacidad.
Revisar esta sección es importante porque podrá respondernos a preguntas como ¿puede saber alguien que he visto su perfil?, ¿todo lo que escribimos en Twitter es visible en LinkedIn?. Comenzamos.
El perfil público
Un detalle, que no mucha gente tiene en cuenta, es la aparición del perfil en las búsquedas públicas, es decir, saliendo directamente en las búsquedas de Google. Por defecto, cualquier usuario de LinkedIn tiene acceso al perfil completo, lo cual está bien si queremos darle a nuestro perfil una orientación de escaparate y consideramos que cualquiera puede tener acceso a nuestro curriculum.
Sin embargo, si no queremos compartir toda la información de perfil con todo el mundo, podemos ajustar la visibilidad de la información de nuestro perfil público. En el menú de configuración, dentro de la sección Configuración de perfil encontraremos la opción Perfil público y accediendo a ella podremos ajustar la visibilidad de nuestros datos para todo aquel que no pertenezca a nuestro grupo de contactos. Si nuestra idea es mostrarlo todo, marcaremos todas las opciones, no obstante podremos personalizar el perfil público marcando y desmarcando los datos que creamos oportunos (foto del perfil, especialidades, historial laboral, intereses, grupos, etc). Por cierto, que desde ahí también podremos personalizar la url de nuestro perfil, al estilo vanity url de Facebook, que luego podremos usar para enlazar nuestro blog, por ejemplo, con nuestro perfil en esta red social.
Actividad en grupos
Por defecto, nuestra actividad en LinkedIn, en los distintos grupos o las modificaciones del perfil, se publica en nuestro perfil y, por tanto, es accesible a nuestros contactos. Dicha visibilidad es controlable desde el apartado Visibilidad de la fuente RSS del usuario y es donde podremos fijar si nuestra actividad será privada o, por el contrario, visible a nuestros contactos, a nuestra red o a todo LinkedIn.
Nuestra actividad en Twitter
Desde el año pasado, podemos visualizar desde LinkedIn nuestra actividad en Twitter y compartirla con nuestros contactos, sin embargo, en determinadas ocasiones subimos comentarios a Twitter que no están muy alineados con la imagen seria que mostramos en LinkedIn y que, directamente, no son adecuados para publicar al lado de nuestro curriculum.
Accediendo a Configuración de Twitter podremos controlar qué tweets serán mostrados desde nuestro perfil y quiénes los tendrán accesibles. Una de las opciones es la de publicar tan sólo los tweets que contengan el hashtag #in.
Visitas al perfil
Alguna vez, revisando mi perfil, he encontrado el listado de usuarios que lo han visitado. Un dato interesante para evaluar si tenemos un perfil atractivo para otros profesionales y empresas . Al entrar en esta sección podremos encontrar dos tipos de información:
Perfiles con nombre, apellidos y fotografía, es decir, la información completa de la persona que visitó nuestro perfil (y que, por tanto, podremos visitar para hacer lo mismo). Una marca anónima del tipo "Alguien en el sector X" de una ciudad y un país determinado (la información geográfica siempre es visible).
Encontramos dos maneras de dejar rastro en el perfil de otros, si bien existe una tercera opción, la de no dejar rastro. Para configurar qué tipo de rastro queremos dejar en los perfiles que visitamos tendremos que acceder al bloque de configuración de la privacidad, concretamente a Visitas al perfil y fijar lo que deseemos mostrar.
Contactos
El principal motivo de existencia de las redes sociales es, precisamente, estar en contacto con otras personas, por tanto, cultivar los contactos es algo básico, en LinkedIn y en cualquier otra red.
Si estamos haciendo contactos con otras empresas, por ejemplo, para cambiar de trabajo y no queremos generar suspicacias en nuestro entorno laboral (que puede formar parte de nuestros contactos), podemos convertir en privada nuestra agenda de contactos.
Esta opción la encontramos disponible en la sección Configuración de la privacidad, en el apartado Explorar contactos.
Otras opciones
Existen otros ajustes en la configuración del perfil en LinedIn a tener en cuenta:
- Directorio de proveedores de servicios, para controlar nuestra visibilidad en el directorio si somos recomendados como proveedores de servicios.
- Aplicaciones autorizadas, para controlar si aplicaciones externas, como About.me, tienen acceso a los datos nuestro perfil y la visibilidad de las aplicaciones externas a insertar dentro del perfil.
- Visibilidad y orden de grupos nos permite configurar qué grupos son mostrados en nuestro perfil y en qué orden.
Dedicando unos minutos a revisar estas opciones podremos controlar toda la información que mostramos y quiénes podrán acceder a ella. De esa forma, nuestro perfil no mostrará ni más ni menos información de la realmente necesaria para cumplir con nuestros objetivos profesionales.
Vía: Networkworld | Imagen: Trece bits