¿Cuál es el animal más ruidoso del mundo? ¿El elefante? ¿El león? ¿Tu vecino el que mueve muebles de madrugada? ¿La que corre maratones con tacones en la planta de arriba? ¿El que juega a las canicas en plena noche? Vale, eso no son canicas. Pero da igual, el animal más ruidoso del mundo no es ninguno de tus vecinos. Ni un gran mamífero. Tampoco es un insecto de sonido atronador, como la chicharra. Pero sí es un insecto. Uno muy pequeñito.

Se trata del barquero de agua (Micronecta scholtzi). Lógicamente, el rugido de un león a nuestro lado se oirá más que el sonido de este animal, que para colmo emite sus chirridos dentro del agua. Pero se le considera el animal más ruidoso del mundo si tenemos en cuenta la proporción a su tamaño. Mide solo dos milímetros y, en los casos más estridentes, su sonido puede llegar a superar los 90 decibelios. Los autores de la investigación de 2011 en la que se descubrió este sonido lo comparaban con lo que oímos en la primera fila de un concierto.

Todo esto es sorprendente, pero lo más curioso es que el barquero de agua no toca la guitarra eléctrica, ni la batería. Emite esos sonidos tan estridentes con su pene, al frotarlo contra su abdomen. Es un ritual de apareamiento, para atraer una pareja. Resulta curioso, pero pedimos encarecidamente a los lectores de este artículo que no intenten reproducir los sonidos del barquero de agua. Es más difícil de lo que parece.

El curioso instrumento del animal más ruidoso del mundo

Los sonidos que emite el barquero de agua se conocen como estridulación. Este es un efecto que se produce cuando un animal emite sonidos al frotar algunas partes de su cuerpo. Se asocia normalmente con insectos, como las chicharras. Estas emiten su molesto y veraniego sonido inflando y desinflando unos sacos de aire situados en su abdomen. No utilizan el pene. Posiblemente su sonido es más llamativo que el del barquero de agua, porque lo emiten en tierra. En cambio, este animal tan pequeño produce su estridulación desde el agua, de modo que buena parte del sonido se pierde al pasar al aire.

Este es precisamente el motivo por el que los autores de aquel estudio de 2011 pensaron inicialmente que el sonido provenía de otro animal. Algo más parecido a una chicharra. Pero no. Es el barquero de agua frotando su pene diminuto sobre su abdomen para atraer a las parejas cercanas. Vive en estanques y lagos de agua dulce de prácticamente toda Europa, así que puede que muchos los hayamos oído y no los hayamos reconocido.

barquero de agua
Mide solo 2 mm, pero emite un sonido similar al de un tren de mercancías. Crédito: ExaVolt (Wikimedia Commons)

Más ruidoso que un tren de mercancías

Cuando aquellos científicos, procedentes de la Universidad de Strathclyde, en Reino Unido, y el Museo de Historia Natural de París, localizaron de dónde procedían esos sonidos, pasaron a medir su intensidad. Comprobaron que, de media, el animal más ruidoso del mundo produce una intensidad de sonido de 78,9 decibelios. Esto es comparable a lo que producen algunos trenes de mercancías. 

Pero esa es solo la media. En algunos casos, se detectaron casi 100 decibelios de sonido. Eso es lo que los científicos compararon con la primera fila de un concierto de música rock. Este, lógicamente, sería un sonido que nos molestaría mucho, pero el agua lo amortigua. Aun así, los científicos están sorprendidos por lo lejos que llega esta estridulación para producirse en tan poco espacio. Lo que es la biología. Hay millones de datos sobre el sonido de este insecto que sorprenden más a los científicos que el hecho de que lo emita con su pene. Cosas más raras se han visto en la naturaleza, la verdad.