Una más del cambio climático. Los huracanes del Atlántico tienen ahora más del doble de probabilidades de intensificarse rápidamente. Debido al calentamiento de la superficie del mar, cada vez más, los huracanes menores se transforman en fenómenos más fuertes y potencialmente catastróficos, advierte un estudio publicado esta semana en Scientific Reports.

En agosto se registró un ejemplo ilustrador: en menos de 24 horas, el huracán Lee pasó de ser un evento categoría 1 —con vientos de una fuerza de 129 kilómetros por hora— a uno de categoría 5 -249 kilómetros por hora—. Lo ocurrido rompió el estándar de lo que los meteorólogos llaman intensificación rápida: cuando los vientos de un huracán aumentan 56 kilómetros por hora en un día. Y es algo que viene ocurriendo más seguido.

El nuevo estudio analizó 830 ciclones tropicales del océano Atlántico desde 1971. El 8,1% de las veces, en los últimos 20 años, las tormentas pasaron de categoría 1 a un huracán mayor —de categoría 3 o más— en 24 horas. De acuerdo con la investigación, esto solo pasó el 3,2% de los casos registrados entre 1971 y 1990.

Que se intensifiquen tan rápido, impide a la población y a las autoridades responder de manera oportuna. «Estamos hablando de algo que es difícil de predecir y que ciertamente puede conducir a una tormenta más destructiva», explicó Andra Garner, científica climática de la Universidad Rowan en Nueva Jersey y autora del estudio, a AP.

«El 90% del exceso de calentamiento que los humanos han causado en el planeta ha ido a parar a nuestros océanos», explicó Garner. La superficie del mar en todo el mes de agosto de este año registró una media mensual de 20,98 °C. Un nuevo récord, de acuerdo con el Servicio del Cambio Climático Copernicus.

Cliclónes y el cambio climático.

El cambio climático detrás de los huracanes catastróficos

Los científicos ya están alertando que 2023 va en camino a ser el año más caluroso de la historia. La temperatura global entre enero y septiembre de 2023 es 0,52 °C más alta que el promedio correspondiente de 1991-2020. Y ya es 0,05 °C más cálida que el promedio de los primeros nueve meses de 2016, actualmente el año calendario más caliente.

Garner descubrió que la rápida intensificación de los huracanes se produce principalmente a lo largo de la costa atlántica de la costa este de EE. UU., más que en el Golfo de México. De 2012 a 2022, más de 160 desastres meteorológicos y climáticos afectaron a EE. UU. Un total de 24 de estos eventos fueron ciclones tropicales, incluidos los seis desastres más costosos registrados en el país en este periodo, destaca el estudio. Y muchos de los huracanes más dañinos se han destacado, precisamente, por la velocidad a la que se han intensificado.

Otro estudio determinó que más del 64% de los daños causados por el cambio climático en todo el mundo están relacionados con tormentas. Los investigadores tomaron en cuenta en 185 desastres naturales, ocurridos entre el 2000 y 2019, que fueron más probables por culpa de la crisis climática. El análisis, publicado en la revista científica Nature Comunications, reporta un promedio de 140 mil millones de dólares al año en daños.

«Si no trabajamos para reducir nuestras emisiones —de carbono—, entonces esa es una tendencia que probablemente podríamos esperar que continúe en el futuro» e incluso empeore, dijo Garner.