Getty Images ahora tiene su propia herramienta generadora de imágenes impulsada por inteligencia artificial. El gigante de la fotografía está trabajando con Nvidia, para perfeccionar un generador que aprovecha su impresionante biblioteca de contenido. De esta forma, a diferencia de la competencia, no tendrá problemas de derechos de autor y, por lo tanto, sería una opción más segura para las marcas.
Getty Images está abrazando la inteligencia artificial, luego de llevar a los tribunales a principio de este año a Stability AI, desarrolladores de Stable Diffusion. En una demanda presentada en febrero, en un tribunal de EE. UU., Getty Images aseguró que Stability AI había utilizado sin autorización más de 12 millones de fotografías de su colección para entrenar a su famoso modelo de generación de imágenes por inteligencia artificial. Le acusó de una «violación descarada de la propiedad intelectual».
La gran diferencia de su nuevo servicio es «comercialmente viable» para clientes empresariales y «no fue capacitado en la Internet abierta con imágenes robadas», dijo Craig Peters, director ejecutivo de Getty Images, a AP. En la práctica, cualquier persona que use su herramienta y publique una imagen con fines comerciales estará legalmente protegida, promete la agencia, basada en EE. UU.
«IA Generativa» de Getty Images estará disponible en la biblioteca de modelos de generación de IA de Nvidia, llamada Picasso. La empresa también tiene a disposición en su web un formulario para solicitar una demo del nuevo producto.
Getty Images compensará a creadores por su modelo de inteligencia artificial
La premisa de uso es la misma que las plataformas de inteligencia artificial lanzadas hasta ahora: el usuario puede describir en texto qué imagen quiere y Getty Images se la da. La agencia promociona que tiene un archivo de 80 millones de imágenes, de más de 1.500 colecciones.
Las imágenes generadas no se añadirán a la biblioteca para que otros las licencien. Las descripciones de texto de los usuarios para crear nuevas imágenes sí se emplearán para seguir entrenando el modelo. Getty marcará las imágenes para que se sepa que fueron producidas por inteligencia artificial, una medida de seguridad que ya han asumido compañías como Google.
La agencia insistió en que ofrecerá «indemnización total por uso comercial» a sus usuarios, en caso de conflictos por derechos de autor. Algo parecido prometió Microsoft, con su Compromiso de Derechos de Autor de Copilot, un programa que garantiza a sus clientes que pueden usar sus servicios de inteligencia artificial generativa sin preocuparse por posibles problemas legales.
Getty Images asegura que los autores originales recibirán un pago por la utilización de sus fotografías o imágenes en este nuevo generador impulsado por inteligencia artificial. La empresa compartirá «los ingresos con ellos a lo largo del tiempo, en lugar de pagar una tarifa única o no pagarla en absoluto», dijo Peters. Sin embargo, no ha explicado cómo ni cuánto.
Límite para imágenes problemáticas
Sobre el precio de la herramienta, Getty Images dijo que tendrá un costo separado al de la suscripción estándar. Explicó que se basará en el volumen inmediato, sin dar más detalles.
Peters aclaró que el nuevo modelo no tiene la capacidad de producir imágenes «deepfake». La herramienta incorporó filtros para evitar, por ejemplo, el uso de rostros de personas reconocidas o marcas. Quienes han accedido a la demo, ya han puesto a prueba el generador y comprobaron que es imposible armar una imagen parecida a la del Papa Francisco con un abrigo de Balenciaga, una viral creada por Midjourney en marzo que causó furor en Internet.
Getty Images también dijo que los clientes podrán eventualmente agregar sus propios datos para entrenar su modelo. De esta forma, tendrá la capacidad de generar imágenes con el estilo propio de su marca. Esta y otras nuevas funciones estarían disponibles antes de que termine el año.
Mientras tanto, Getty Images insistirá en la demanda contra Stability AI, que también fue acusada por un grupo de artistas. La agencia sostiene que tiene derecho a una indemnización de hasta 150.000 dólares por cada obra infringida. Técnicamente, podría sumar 1,8 billones de dólares como compensación. Stability, por su parte, intentará desestimar el caso, pero no ha respondido formalmente a las acusaciones.