En 1961, se estrenó en la NBC el primer drama médico de la historia de la televisión. Doctor Kildare, protagonizado por un jovencísimo Richard Chamberlain, contaba la historia de un interno en busca del amor. La serie se convirtió en un éxito inmediato. Durante sus cinco temporadas, el protagonista llegó a enamorarse —más de una vez—y al mismo tiempo mostró al público lo que ocurría dentro de un hospital. Con una visión enaltecedora de la medicina, fue el comienzo de un fenómeno que sigue vigente.
De hecho, los argumentos ambientados en hospitales son un género predilecto en la pantalla pequeña contemporánea. Con el paso de los años, se han hecho más elaborados y son más fieles a la realidad médica. Aunque sin olvidar el ingrediente romántico y conmovedor de sus historias. Poco a poco, lo que surgió como una forma de contar historias en escenarios poco frecuentes se convirtió en un género por derecho propio de enorme popularidad.
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Algo que, por supuesto, se ha extendido a las diversas plataformas de streaming, que incluyen en su catálogo este tipo de contenidos. Para que no te quedes atrás, te recomendamos cinco dramas médicos que puedes ver ahora mismo en Star+. Las propuestas incluyen desde comedia hasta un clásico popular. Una colección que explora en todas las dimensiones de los grandes relatos médicos, imprescindibles para cualquier amante de las series.
The resident
Conrad Hawkins (Matt Czuchry) es un residente del Chastain Park Memorial Hospital. En su día a día, se enfrenta a la burocracia del sistema de salud, a numerosas presiones y a la atenta mirada de la directiva de la institución. Con el tiempo, tendrá que tomar decisiones arriesgadas cada vez con mayor frecuencia, lo que muchas veces le obligará a elegir entre obedecer las reglas o salvar la vida de un paciente.
Sin duda, el tópico del rebelde defensor de una causa justa es común en los dramas médicos. Pero The resident lo lleva a un nuevo nivel al basar su narración en la capacidad de Hawkins para enfrentarse a la injusticia. El guion de Amy Holden Jones, basado en el libro Unaccountable, de Marty Makary, explora el sector médico a partir de la ética y la búsqueda del bien. Pero también desde el esfuerzo —dramatizado— de hombres y mujeres dispuestos a hacer todo lo necesario para cumplir su juramento de salvar vidas.
Con seis temporadas, este drama médico no logró convertirse en un éxito de audiencia. Durante su cuarta temporada, la producción se vio envuelta en la compra de Fox por parte de Disney. Cuando el proceso terminó, el rodaje entró en un largo parón del que solo regresó para ser cancelada en el año 2023. Aun así, todavía tiene un grupo de fervientes fanáticos que puede disfrutar de sus capítulos completos en Star+.
Scrubs, un relato médico muy divertido
La historia del productor Bill Lawrence es una de las favoritas del público por una buena razón. La serie combina lo mejor del drama médico con un sentido del humor retorcido que le brinda una personalidad irrepetible. Con 182 episodios, la vida en el hospital Sacred Heart se convirtió en un éxito inusual en la televisión. Especialmente, al explorar nuevas dimensiones de un género que, por entonces, parecía haberse estancado.
Gradualmente, las vivencias de J.D (Zach Braff), Chris Turk (Donald Faison) y Elliot Reid (Sarah Chalke) mostraron una versión del mundo médico desenfadada y divertida. Contada en primera persona y con una curiosa moraleja al final de cada episodio, la serie fue mucho más un conjunto de anécdotas que un argumento sólido. Sin embargo, invitaba a reflexionar sobre el día a día en una profesión muy exigente, aunque desde la perspectiva de una figura excéntrica.
Considerada una de las mejores comedias de las últimas tres décadas, esta historia de hospitales se extendió a lo largo de nueve temporadas. La última de las cuales, que no llegó a agradar demasiado a los fanáticos, cerró diez años de risas y lágrimas. Un logro que transformó Scrubs en una de las producciones más y mejor recordadas.
Sin cita previa
Anatomía de Grey es un fenómeno que ha tenido repercusión directa en la mayoría de los dramas médicos actuales. De hecho, parte de su legado incluye haber logrado un spin-off exitoso que completó su idea principal. La idea de que los médicos tienen dificultades para conciliar su vida privada con la profesional, que tanto se abordó en la clásica serie, llegó a su punto más alto a través de Sin cita previa.
El argumento sigue la vida de Addison Montgomery (Kate Walsh) después de abandonar el hospital Seattle Grace y mudarse a Los Ángeles. Allí la doctora comienza a trabajar en una clínica, en la que puede comprobar de primera mano la diferencias entre el sistema público de salud y una visión desconocida para ella de la medicina. Más enfocada en los dilemas morales que amorosos de sus protagonistas, la serie explora en la ética, el deber profesional y el miedo a cometer errores. Temas que dieron a la producción el tono desenfadado, aunque sobrio, de la historia de la que procede.
New Amsterdam, el drama médico de moda
El hospital que da nombre al argumento de este relato médico es el más viejo de Norteamérica y uno de los más célebres de Nueva York. Aunque también es el que tiene una estructura burocrática más rígida. El doctor Max Goodwin (Ryan Eggold) tendrá que enfrentarse a ella para sacar adelante los casos más duros y ayudar a pacientes que no encontrarían atención médica en ningún otro lugar.
Todo ello mientras sufre de un cáncer agresivo, afronta la pérdida de su esposa y está a cargo de la crianza de un bebé de meses. La adaptación del libro Twelve Patients: Life and Death at Bellevue Hospital, de Eric Manheimer, narra de manera emocional la historia de un hombre excepcional. Pero, en lugar de inclinarse hacia lo cursi, hace énfasis en su temple y su bondad. Lo que convierte este drama médico sobre su vida en toda una lección de fe y esperanza.
La que fue considerada digna heredera de los grandes dramas médicos de la década de 1960, terminó con una quinta temporada que cerró su historia con dignidad. Aunque siempre será recordada por su tono optimista y amable, fue una de las pocas en afrontar la emergencia mundial de la pandemia desde un ángulo realista y respetuoso.
M*A*S*H
Star+ también incluye en su catálogo un clásico que, aunque no es exactamente un drama médico, se sirve de la medicina para analizar la naturaleza humana. M*A*S*H se estrenó en CBS el 17 de septiembre de 1972 sin otra aspiración que hacer reír. Para su capítulo final, emitido el 28 de febrero de 1983, la producción se había transformado en un éxito. Uno que analizaba la guerra, el duelo y el sufrimiento a través del humor y la buena voluntad.
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Star+ solo está disponible en Latinoamérica
Este relato médico es un claro ejemplo de la evolución de las historias televisivas hacia lugares más complicados y duros. Ambientada en un hospital de campaña del ejército estadounidense en Uijeongbu durante la guerra de Corea (1950–1953), el argumento es cómico. Sin embargo, también profundiza con destreza en temas como la moral en el conflicto bélico, el miedo o la redención. Una combinación que la convirtió en uno de los argumentos más famosos del mundo del entretenimiento, ahora disponible para el público contemporáneo.