Oppenheimer, dirigida por Christopher Nolan, enfoca su interés argumental en la posibilidad y el proceso de la construcción de la bomba atómica. Aunque la película profundiza en varios escenarios a la vez, el guion, también escrito por el director, pone especial foco en el arma que lo cambió todo y rebalanceó los poderes militares mundiales. Sobre todo, el punto de vista del científico titular acerca de la creación de un artefacto con una capacidad destructiva absolutamente devastadora. Esta es la historia de la prueba Trinity y cómo lo cambió todo.
El cuestionamiento es obvio. Parte de la cinta, reflexiona en la sorpresa y después, el arrepentimiento de Oppenheimer (Cillian Murphy) tras desatar un poder inimaginable. También, la mera realidad de la bomba atómica, despertó la preocupación en todos los involucrados en el proyecto Manhattan. Su detonación cambió el mundo, el equilibrio político y convirtió a la carrera armamentista en un camino peligroso hacia la posibilidad de la devastación total.
Pero, ¿cuánto de lo que se muestra en la película es real y que tanto no lo es? En realidad, el largometraje de Christopher Nolan atraviesa una región complicada entre la biografía y el drama histórico. Basado en el libro American Prometheus de Kai Bird y Martin J. Sherwin, narra la dura época que vivió Robert Oppenheimer. También los pormenores de su participación en una iniciativa cuyo principal objetivo, era ganar carrera armamentista de la Segunda Guerra Mundial. Por lo que la prueba Trinity, el ejercicio final de todos los experimentos relacionados con la energía atómica, ocupa un lugar relevante.
Una explosión que cambiaría la historia
En la cinta se describe el desconcierto que rodeó a la posibilidad de un tipo de poder que hasta entonces, solo existía a nivel teórico. De hecho, en el año 1945, todavía no había ninguna prueba verificable sobre una explosión nuclear. Los parámetros de liberación variaban ampliamente. Incluso, en Los Alamos, sitio en que se llevaron a cabo las investigaciones relacionadas con la energía nuclear, había dudas que la bomba funcionara.
Lo que llevó a la decisión de una detonación controlada. El único inconveniente era el temor a un fallo que pudiese provocar al fracaso del proyecto. De la misma forma que narra la película, la carrera no solo era contra el tiempo y el desgaste de recursos en la Segunda Guerra Mundial. También, con la posibilidad que los científicos alemanes, estuvieran trabajando en un artefacto similar. Lo que, sin duda, se convertiría en un peligro global y en un riesgo para el resultado favorable a los aliados en el conflicto bélico.
No obstante, Robert Oppenheimer insistió en que el diseño de la bomba era confiable y que había una alta posibilidad que triunfara. Por lo que se programó una prueba con una de las varias de las bombas de plutonio que se encontraban en el laboratorio. La idea era recabar datos acerca de qué podía ocurrir con una explosión nuclear. Algo que hasta entonces era puramente hipotético.
Prueba Trinity: el inicio del terror nuclear
El primer intento de detonación fue bautizado como Prueba Trinity, debido a uno de los poemas del británico John Donne. Para evitar cualquier percance, contaminación radiactiva o incidente incontrolable, se escogió una zona casi inaccesible en el Campo de Bombardeo de Alamagordo. Incluso, la selección del lugar, fue una decisión a la que Oppenheimer brindó un sentido metafórico. Llamada de forma no oficial la Jornada del Muerto, se encontraba a 337 al sur de Los Álamos. Una región rocosa y árida que se suponía, podía soportar un impacto de incalculable fuerza sin revestir riesgos.
A pesar de eso, antes del experimento, se probó que el paraje fuera el idóneo por medio de una gigantesca explosión con materiales inflamables convencionales. El suceso se llevó a cabo el 7 de mayo de 1945. Los resultados de la prueba Trinity fueron satisfactorios, por lo que los preparativos continuaron.
Prueba Trinity: la llegada del poder atómico
Se construyeron tres búnkeres de observación que se esperaba, pudieran permitir a los científicos hacer un cálculo, más o menos exacto, acerca de la prueba. Lo que incluía, la simetría de la explosión y la cantidad de energía que podría liberarse en un solo impacto.
El 12 de julio, el núcleo de plutonio fue llevado al área bajo estrictas medidas de seguridad. El día después, se añadieron los componentes no nucleares. Durante los días previos al evento, se tomaron todas las precauciones, lo que incluyó evacuar a la población circundante.
Las crónicas del momento, mencionan que Leslie Groves, Vannevar Bush, James Conant, Ernest Lawrence, Thomas Farrell, James Chadwick estaban convencidos de que la bomba no detonaría. Que, incluso, el propio Oppenheimer también lo creía.
Pero, la era nuclear comenzó tras su detonación. El artefacto explotó sobre el desierto de Nuevo México, en una ola expansiva de fuego que destruyó la torre que la sostenía y el asfalto a su alrededor. Pocos segundos después, una segunda columna se elevó, formando el hongo atómico, cuya imagen pasó a la historia. Una circunstancia que la película muestra en una aterradora secuencia técnica que causa asombro y fascinación a la vez.