Si conoces la historia de Elon Musk, sabrás que un factor importante en el éxito del magnate fue la existencia de una mina de esmeraldas. Pues bien, desde su popularización en los medios, Musk ha intentado distanciarse de esta narrativa. "¡Pagaré un millón de Dogecoin por pruebas de la existencia de dicha mina!", aseguraba en Twitter. Ahora, parece que el CEO de SpaceX tendrá que hacer una transferencia directa a su propio padre, quien ha sido el primero en declarar y confirmar la historia.

Errol Musk confirmó la existencia de la mina al medio The Sun en una entrevista reciente. "Cuando leí eso -el tweet de Elon-, me pregunté '¿puedo participar? Porque puedo demostrar que existió'", comentaba el progenitor. "Elon sabe que es cierto. Todos los chicos saben al respecto", sentenciaba.

Además, el padre del magnate no solo afirma que Elon sabía acerca de la existencia de dicha mina, sino que también alcanzó a ver algunos de los minerales en su hogar. "Elon vio las esmeraldas en nuestra casa. Sabía que estaba vendiéndolas".

Para confirmar su relato, Errol mostró al citado medio algunas imágenes donde se aprecian las esmeraldas extraídas de la mina. Asimismo, confirmó algunos detalles acerca de la zona de extracción y cómo se convirtió en uno de los negocios principales de la familia Musk.

La historia detrás de la mina de esmeraldas que tanto disgusta a Elon Musk

Errol Musk, padre de Elon y antiguo participante en una mina de emeraldas en Zambia

El padre de Elon Musk aprovechó su momento con el medio para contar más acerca de la historia tan despreciada por su hijo. Según comenta, su participación en este negocio comenzó tras conocer al propietario de la mina, un hombre italiano, mientras ambos se encontraban en una pista de aterrizaje de Zambia –de la que además también era propietario–. Aquí, ambos hicieron buenas migas y, tras una invitación de aquel hombre a Musk para formar parte de la operación, este decidió aceptar.

El italiano comentó a Errol que pagaba a los lugareños de dicha región de Zambia para excavar y extraer el mineral. Sin pensarlo demasiado, Musk se subió también al barco y comenzó una nueva etapa para el negocio familiar.

Eso sí, si hay algo en lo que Errol da la razón a Elon es que no se trataba de una mina per se. La operación no existía formalmente en documentos o estados financieros y todo se mantuvo "por debajo de la mesa". "No había ninguna empresa minera. No hay acuerdos firmados ni estados financieros. Nadie era dueño de nada. El trato se hizo con un apretón de manos con el italiano en un momento en el que Zambia era un país libre para todos", aseguró.

Lo que Elon está diciendo es que no había ninguna mina formal. Era una formación rocosa que sobresalía de la tierra en medio de la nada

Errol Musk a The Sun

La narrativa del millonario que se ha construido a sí mismo

Elon Musk

Errol Musk tiene una teoría que aclara las razones por las que Elon desea distanciarse de esta narrativa. Según su propio padre, "la mayor preocupación de Elon es no parecer un 'niño con fideicomiso' al que le han dado todo en bandeja de plata".

Recordemos que parte del éxito de Elon Musk –y otros multimillonarios– está en convencer a su base de seguidores de que se han construido a sí mismos. El poder real de estas figuras no está en ellos como personas, sino en la percepción colectiva que los convierte en un modelo aspiracional. Un objetivo supuestamente alcanzable por cualquier persona. Claramente, este mito se diluye cuando tomamos en cuenta el contexto de personas como Musk y los privilegios que tuvieron al crecer, por lo que es un tema que muchos prefieren ignorar al relatar su historia.

Eso sí, el padre de Musk no quita todo el mérito a su hijo. "Elon asumió riesgos y trabajó como un demonio para estar donde está hoy", comenta. "Las esmeraldas nos ayudaron en una época muy dura en Sudáfrica, cuando la gente huía en masa del país, incluida toda la familia de su madre, y las oportunidades de ganar dinero estaban bajo mínimos".