Carl Pei, fundador de Nothing, ha afirmado a la CNBC que uno de los mayores desafíos a los que se ha tenido que enfrentar en el desarrollo de su primer móvil, el Nothing Phone (1) fue cuando pidió ayuda a Foxconn (la principal encargada de ensamblar los iPhone) para producir sus smartphones, y la compañía rechazó la solicitud justificando un motivo que, ciertamente, es muy diferente al que nos imaginábamos.
Foxconn, quien no tiene ningún tipo de exclusividad con Apple y ensambla dispositivos de otras marcas, denegó prestar sus servicios a Nothing alegando fracasos con compañías similares a las de Carl Pei, y no porque el Nothing Phone (1) tuviese un diseño muy parecido a los iPhone de los últimos años, como muy probablemente estés pensando. Según el CEO de la firma, la taiwanesa no quiso colaborar con ellos porque todas las startups que han pasado por el mismo proceso “fracasaron”, y es algo que a Foxconn le hace perder dinero.
“Todos los fabricantes de startups han trabajado con Foxconn. Pero cuando nos tocó a nosotros, dijeron que no porque todas las startups que trabajaron con ellos fracasaron. Y cada vez que una startup fracasaba, Foxconn perdía dinero con ella, no era capaz de recuperar sus costes”.
Nothing, pese a este pequeño inconveniente, presume de haber superado el millón de unidades vendidas en todos sus productos, con un total de 500.000 Nothing Phone (1) enviados desde su lanzamiento desde julio de este año. Ahora, se preparan para adentrarse en Estados Unidos.
El Nothing Phone (1) llegará al mercado norteamericano para intentar competir con el iPhone
La compañía, con sede en Londres, recordemos, solo ha puesto a la venta el Nothing Phone (1) en Europa y algunos países de América Latina, pero está lista para expandir su comercialización en Estados Unidos. No lo han hecho antes, porque, según Carl Pei, en el mercado estadounidense hace falta “mucho soporte técnico adicional” con el objetivo de “apoyar a todos los operadores y sus personalizaciones únicas que necesitan hacer además de Android”. Por el momento, afirma, se encuentra conversando con transportistas en Estados Unidos para distribuir sus productos.
Vender el Nothing Phone (1) u otros productos en el mercado estadounidense, además, puede ser la clave para conseguir el objetivo marcado por el propio CEO de la marca: ser rentables en 2024. “Definitivamente, es un mercado donde ya hay mucho interés por nuestros productos. Y si lanzamos nuestros teléfonos inteligentes allí, estoy seguro de que podríamos obtener un crecimiento significativo”, destaca Pei.
Por el momento, y pese a que esperan que sus ingresos se multipliquen por diez este 2022 frente al año pasado, Nothing continúa reportando pérdidas, entre otros motivos, por el cambio de divisas. “Pagamos muchos de nuestros COGS [costo de los bienes vendidos] en dólares, pero ganamos dinero en libras, en euros, en rupias indias, por lo que todo se devalúa frente al dólar”.