No podíamos despedir el 2022 sin una nueva tendencia que impactara a todo internet. ChatGPT siguió la estela de otras propuestas de inteligencia artificial que, a lo largo del año, nos maravillaron por sus sorprendentes capacidades. Pero incluso aunque hoy en día seguimos sin poder creer que una IA tenga la capacidad de redactar texto con tal nivel de calidad, en el futuro podría ser vista como un "juguete aburrido". Así se refirió Sam Altman, CEO de OpenAI.

Lo anterior, sin embargo, no quiere decir que ChatGPT perderá capacidades o que se hará demasiado ‌mainstream hasta pasar desapercibida en la cotidianidad, sino que en camino vienen tecnologías todavía más extraordinarias. Eso es precisamente lo que el mencionado directivo ha querido explicar a través de su cuenta de Twitter.

"Habrá momentos aterradores conforme avanzamos hacia sistemas de nivel AGI [Inteligencia Artificial General] y disrupciones significativas, pero las ventajas pueden ser tan sorprendentes que bien vale la pena superar los grandes desafíos para llegar allí. Veremos grandes beneficios a lo largo del camino: harán que ChatGPT parezca un juguete aburrido."

¿Te imaginas lo que verá la luz en el futuro para que consideremos a ChatGPT como una herramienta sin demasiada utilidad? Seguramente por esa razón el responsable de OpenAI los llama "momentos aterradores". Es muy cierto que solemos reaccionar con incredulidad cuando vemos que una inteligencia artificial desempeña tareas anteriormente solo realizadas por humanos. Además, en un tiempo considerablemente menor.

Por otro lado, Altman reconoce que las soluciones de inteligencia artificial de OpenAI también causarán problemas en el futuro. La IA tiene muchos beneficios, sí, pero también inconvenientes cuando está en las manos equivocadas. Sin ir más lejos, los Deepfakes causan gran preocupación porque cada vez es más difícil reconocerlos. Muchos los están usando para difundir noticias falsas o para encontrar trabajo remoto, por ejemplo.

ChatGPT y otras IAs evolucionarán, pero también traerán problemas

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A pesar de lo anterior, desde OpenAI están dispuestos a afrontar esos inconvenientes, pero sabiendo que no siempre lograrán resolverlo todo en primera instancia. "Haremos nuestro mejor esfuerzo, pero no anticiparemos con éxito todos los problemas. Ejecutaremos un ciclo de retroalimentación muy estricto para mejorar e intentaremos cometer errores mientras haya poco en juego", comentó Altman.

Una evidente dificultad es que, para realmente comprobar las capacidades de una inteligencia artificial, sí o sí se tiene que probar allá afuera. En consecuencia, los problemas derivados tendrán impacto en el mundo real, en menor o mayor medida…

El CEO de OpenAI culminó su intervención diciendo que ChatGPT irá mejorando con el paso del tiempo. En gran parte porque ahora se está usando muchísimo y esto les permite obtener la retroalimentación necesaria para introducir cambios positivos.

"Estamos aprendiendo mucho de ChatGPT; va a ser mucho mejor, menos molesto y casi más útil."

Las palabras de Altman son bastante interesantes porque nos hacen visualizar un futuro donde la inteligencia artificial está todavía más involucrada en la vida diaria de la humanidad, para bien y para mal.

Últimamente hemos visto el interés de los científicos por aprovecharla en el campo de la medicina e incluso en la exploración de nuestro Sistema Solar, por mencionar solo un par de áreas de oportunidad de muchas posibles. Indudablemente, ChatGPT y sus similares son solo la punta de iceberg.