SpaceX, una de las empresas fundadas y dirigidas por Elon Musk, ha adquirido uno de los mayores paquetes publicitarios disponibles en Twitter, plataforma que desde hace unas semanas también es propiedad del magnate sudafricano. Según la CNBC, la compañía aeroespacial pretende promocionar Starlink, su servicio de internet de banda ancha vía satélite, en España y Australia. Lo hará, con una inversión de más de 250.000 dólares en la red social.
El paquete publicitario adquirido por SpaceX, llamado “takeover” o “toma de posesión” es, reiteramos, uno de los más completos de la plataforma. Permite a las empresas mostrar sus productos o servicios en anuncios que aparecen en la primera línea del feed durante un día entero. Según el citado medio, las marcas suelen gastar más de 250.000 dólares en esta acción. Esta, al menos el caso de SpaceX, hará que cada usuario vea como mínimo 3 veces el mismo anuncio cuando entra a Twitter “el día o los días de la campaña”, asegura la CNBC.
Se espera que los anuncios de SpaceX, y más concretamente de Starlink, comiencen a mostrarse los próximos días a los usuarios de Australia, donde el servicio ya está disponible. Más adelante, también comenzará a aparecer a los usuarios de España, donde Starlink lleva operativo desde el pasado mes de enero.
Las grandes marcas pausan sus campañas en Twitter tras la compra de Elon Musk
Es, sin duda, un movimiento atípico por parte de SpaceX, compañía que hasta ahora no ha adquirido campañas publicitarias en Twitter. O, al menos, no tan grandes como las del mencionado paquete. No obstante, y teniendo en cuenta que la compañía aeroespacial es propiedad de Elon Musk (y que Musk también es dueño de Twitter), no resulta tan extraño. No lo es, además, sabiendo que el negocio publicitario de Twitter, que representa un 90 % de sus ingresos, no está pasando por un buen momento desde que el ejecutivo completó la compra de la plataforma.
¿La causa? Principalmente, la huida de grandes anunciantes después de la incertidumbre tras la compra de Twitter por parte de Elon Musk. Así como del temor a que la plataforma se convierta en un lugar donde reine el discurso de odio. Si bien muchas de estas “retiradas” por parte de compañías como Volkswagen o Interpublic Group of Companies (IPG) podrían ser temporales, hacen que Twitter actualmente pueda generar ingresos al mismo nivel que lo hacía hace unos meses.
De hecho, Elon Musk no descarta declarar Twitter en bancarrota si “hay un flujo de caja negativo masivo”. Al menos, así lo aseguró en una reunión con empleados de la compañía. Subrayó, además, que su afán por las suscripciones tenía como objetivo “mantener vivo a Twitter”. Musk tampoco descarta hacer de la red social un lugar completamente de pago para obtener ganancias, mientras continúa despidiendo empleados.