Después de infinidad de rumores surgidos en el transcurso del último año, Google anunció el cierre de Stadia. La plataforma de juegos en streaming nunca logró ganarse un lugar definitivo entre el público, por lo que el gigante de Mountain View ha decidido discontinuarla y enfocar el uso de su tecnología en otros servicios.
Stadia continuará funcionando hasta el 18 de enero de 2023, fecha hasta la cual los jugadores podrán seguir accediendo al servicio y los juegos en su biblioteca. Además, Google reembolsará todas las compras de hardware realizadas a través de su tienda, así como las de juegos y complementos realizadas desde el servicio.
Vale remarcar que los reembolsos no aplicarán para los suscriptores de Stadia Pro, aunque podrán seguir usando el servicio sin pagar hasta que se lo dé de baja. En cuanto a los mandos, los usuarios no deberán devolverlos pese al reintegro del dinero. Google ha publicado un artículo de preguntas frecuentes que puedes consultar aquí.
"Hace unos años lanzamos un servicio de juegos para consumidores, Stadia. Y si bien su enfoque [...] se basó en una sólida base tecnológica, no ganó la tracción entre los usuarios que esperábamos, por lo que tomamos la difícil decisión de comenzar a discontinuarlo", indicó Phil Harrison, vicepresidente y gerente general de Stadia.
Pero el cierre de la plataforma no implica que la tecnología que la potencia se tire a la basura. Por el contrario, Google pretende sacarle partido integrándola en otros de sus servicios, tales como YouTube y Google Play. Además, los californianos también planean adaptarla a sus planes en el ámbito de la realidad aumentada, así como ofrecerla a terceros en la industria de los videojuegos.
"Seguimos profundamente comprometidos con los juegos y continuaremos invirtiendo en nuevas herramientas, tecnologías y plataformas que impulsen el éxito de los desarrolladores, socios de la industria, creadores y clientes en la nube", agregó el ejecutivo de Stadia.
Stadia se despide con muchas buenas intenciones y poco éxito
El cierre de Stadia se anuncia tras una incontable cantidad de rumores que pusieron en tela de juicio su continuidad durante el último año. La primera gran señal de alarma apareció en febrero de 2021, cuando Google abandonó el desarrollo de videojuegos para la plataforma y cerró sus estudios de Los Ángeles y Montreal dedicados a dicha labor.
En julio, en tanto, los de Mountain View anunciaron una rebaja de su comisión a los desarrolladores por vender sus juegos en Stadia. La intención era llamar la atención de más estudios, así como cautivar a un mayor número de jugadores con un catálogo más nutrido. Sin embargo, esto tampoco parece haber dado los resultados esperados.
Finalmente, en febrero de este año se conoció que Google había quitado a Stadia de su lista de prioridades. La compañía pretendía cambiar su estrategia y enfocar sus esfuerzos en el gaming a la provisión de su estructura a terceros. Algo que, supuestamente, haría bajo la marca Google Stream.
Esto les permitiría a los interesados llevar sus juegos a la nube por su cuenta, pero aprovechando la tecnología de Stadia. Así fue como Peloton, la marca de bicicletas estáticas, lanzó Lanebreak, un videojuego de ejercicios para los suscriptores de Peloton Bike y Peloton Bike Plus.
La confirmación del cierre de Stadia deja en claro que la plataforma fue una apuesta muy interesante, pero que nunca fue pasión de multitudes. De hecho, gran parte de las críticas que recibió Google fueron por abordar una estrategia de distribución demasiado convencional. Es decir, que los usuarios debieran pagar individualmente por cada juego —independientemente de los beneficios para los suscriptores a Stadia Pro—. Lo que la llevó a quedar rápidamente eclipsada ante alternativas rivales como Xbox Cloud Gaming.