Buenas noticias para SpaceX. La firma de Elon Musk ha recibido la autorización de la Comisión Federal de Comunicaciones de Estados Unidos (FCC) para llevar el internet de Starlink a vehículos en movimiento. Esto significa que dicho servicio podrá ser implementado en aviones, barcos y vehículos terrestres como automóviles, camiones y remolques.
Sin lugar a dudas, se trata de una novedad muy importante para la empresa estadounidense, que ya llevaba unos cuantos meses esperando esta aprobación. Hasta ahora, la provisión del servicio de Starlink ha estado limitado a terminales en ubicaciones fijas.
Y si bien es cierto que las antenas se pueden trasladar para utilizarlas desde una ubicación remota, sin que necesariamente sea una casa u oficina, la compañía no tenía el visto bueno para brindar su acceso a internet a medios de transporte en movimiento.
Pero la autorización otorgada por la FCC promete cambiar el panorama para SpaceX. La firma ha mostrado especial interés en llevar el internet de Starlink a vuelos comerciales, y ya lo ha testeado. De hecho, en abril se comenzó a probar en Estados Unidos a través de Delta Airlines; no obstante, aún falta el ok de la Administración Federal de Aviación (FAA) para certificar los receptores que se deben instalar en las aeronaves.
Un punto importante para remarcar es que SpaceX no ha sido la única empresa a la que las autoridades han habilitado a llevar su internet satelital a vehículos en movimientos. La firma canadiense Kepler Communications también ha recibido una autorización similar, aunque limitada a buques que naveguen tanto en aguas territoriales de Estados Unidos como en aguas internacionales.
El internet satelital de Starlink, un paso más cerca de los vuelos comerciales y otras formas de movilidad
Así valoró la FCC los servicios de conectividad que tanto Starlink como Kepler Communications pretenden ofrecer:
"Coincidimos con SpaceX y Kepler en que el interés público se beneficiaría al conceder con condiciones sus solicitudes. La autorización de una nueva clase de terminales para el sistema satelital de SpaceX ampliará la gama de capacidades de banda ancha para satisfacer las crecientes demandas de los usuarios que ahora requieren conectividad mientras están en movimiento, ya sea conduciendo un vehículo recreativo por todo el país, trasladando un carguero de Europa a un puerto de EE. UU. o durante un vuelo nacional o internacional. De manera similar, la autorización del servicio de Kepler proporcionará conectividad muy necesaria a los buques en aguas territoriales de Hawái y Alaska y en áreas remotas en todo el mundo, incluidas las regiones polares del Ártico y la Antártida".
Comisión Federal de Comunicaciones
Sin dudas, estas autorizaciones prometen tener un impacto muy importante entre los consumidores; especialmente en el caso de Starlink y su implementación en vuelos comerciales. Si la compañía de Elon Musk logra llevar su internet satelital a las principales aerolíneas, cambiará drásticamente el panorama de la conectividad en vuelo.
Tengamos en cuenta que las opciones de conexión a internet en viajes aéreos siguen siendo tremendamente limitadas. Las velocidades de carga y descarga son muy lentas y los servicios son exageradamente caros para la calidad de servicio que se obtiene. Es cierto que algunas aerolíneas permiten acceder gratis a viajeros frecuentes o a miembros de programas relacionados a determinadas tarjetas de crédito. Sin embargo, el común de la gente todavía debe dispensar una importante cantidad de dinero para interactuar con su correo electrónico o redes sociales. Y esto es solo una parte de lo que puede cambiar de la mano de Starlink.
No olvidemos que en algunas países el internet en vuelo se encuentra limitado a viajes intercontinentales; sin planes a corto plazo de implementarlo local o regionalmente. En estos casos, lo máximo a lo que pueden aspirar los viajeros es a conectarse al WiFi del avión para acceder al sistema de distribución de contenidos multimedia que se da a través de las apps de las líneas aéreas (que muchas veces funcionan realmente mal).
Por lo pronto, Starlink ha superado un escollo regulatorio importante para llevar su internet satelital a vehículos en movimiento. Sin dudas, esto significará una posibilidad de expansión muy importante para SpaceX, comenzando por la aviación comercial pero no quedando limitada a ella.