Apple, sin duda, dio un golpe sobre la mesa con sus primeros chips ARM para ordenadores (Apple Silicon). El rendimiento y eficiencia energética de los M1 y sus variantes Pro han sorprendido a toda la industria, y podría marcar un antes y un después para todo el sector portátil en el futuro próximo. Es evidente, sin embargo, que Apple no es la única compañía interesada en dejar su huella en dicho mercado. Qualcomm también ha levantado la mano.

Dentro de un par de años, la rivalidad entre Apple y Qualcomm se trasladará más allá de los SoC para smartphones y tablets. Según una hoja de ruta que Qualcomm hizo pública en un evento para inversionistas (vía The Verge), su plan es incursionar de lleno en el mercado de los chips ARM para PCs a lo largo de 2023. Claramente, Qualcomm quiere aprovechar un mercado en el que Intel y la arquitectura x86 llevan años dando señales de rezago.

Ahora bien, esta no sería la primera experiencia del fabricante con chips para ordenadores, pues actualmente poseen el Snapdragon 8cx Gen 3, por ejemplo. Sin embargo, para 2023 quieren lanzar una propuesta que sea capaz de plantar cara al SoC M de Apple. ¿Cuál es el problema? Pues que los de Cupertino les llevan varios años de ventaja y no parece que vayan a pisar el freno con la innovación de Apple Silicon.

Qualcomm se apoya en antiguos ingenieros de Apple

Apple M1 Pro y M1 Max, Qualcomm

De acuerdo a James Thompson, director de tecnología (CTO) de Qualcomm, su objetivo es tener listos algunos chips de prueba 9 meses antes del lanzamiento (2023). Es decir, es probable que el próximo año comencemos a vislumbrar el potencial de su propuesta para la PC. Vale la pena mencionar que el ambicioso proyecto está en las manos de Nuvia, una startup por la que desembolsaron 1.400 millones de dólares a principios del presente año.

Curiosamente, Nuvia fue fundada por antiguos ingenieros de Apple que participaron en el desarrollo de la familia de chips A —que hasta la fecha integran los iPhone e iPad—. La promesa de Qualcomm es bastante ambiciosa, y se alinea con lo que Apple ya está ofreciendo actualmente: gran rendimiento (tanto en CPU como en GPU) y gran autonomía. Si todo sale conforme a lo planeado, quizá no sea Apple quien deba preocuparse, sino Intel y AMD