En medio de una vorágine –otra más– de escándalos por las políticas internas de la compañía, Mark Zuckerberg ha decidido deshacerse de Facebook para dar paso a Meta. Así lo ha revelado en Connect, el evento anual de realidad virtual y aumentada de la firma.
Un cambio con el que espera dejar atrás las cada vez mayores polémicas que rodean a la tecnológica de Menlo Park y lanzarla de lleno al metaverso. Esta es la nueva ambición de la empresa comandada por Zuckerberg, a la que está destinando ingentes recursos.
Y es precisamente ese nuevo enfoque el que ha empujado a la archiconocida, pionera en muchas cosas, referente y mal ejemplo para otras tantas, Facebook, a desaparecer.
Meta, una nueva identidad para Facebook
Zuckerberg, tras una larga espera, daba a conocer Meta. Es el nombre escogido, mantenido en secreto hasta ahora, que hará de estandarte para la firma californiana.
Bajo él se agruparán, a partir de ahora, tanto la red social primigenia como Instagram, WhatsApp, Oculus y el resto de proyecto de la empresa.
El empresario afirma que sirve no solo para reflejar el nuevo enfoque hacia el metaverso, sino para expresar lo mucho que ahora abarca la empresa. Así, se desliga de la red social homónima, que seguirá llamándose así, para ahondar en una visión más profunda.
"Siempre hay algo más que construir", ha dicho Zuckerberg, en referencia a la nueva designación. Meta, que halla sus raíces en el griego, es un término que podría traducirse como "más allá" o "después de".
Es eso lo que quiere reflejar la nueva etapa de la tecnológica. Una era en la que serán "metaverso primero, no Facebook primero", según expresaba el CEO.
Meta no es consecuencia de las críticas
Indudablemente, un cambio de tanta relevancia levanta miradas suspicaces. ¿Se trata de un lavado de imagen o realmente hay algo más?
Zuckerberg, en una entrevista concedida al medio norteamericano The Verge, asegura que empezó a barruntar la posibilidad de un nuevo nombre con las compras de WhatsApp e Instagram, años atrás. No ha sido hasta este año, no obstante, cuando el CEO tuvo claro que quería dar el paso.
Reconoce que el panorama actual alrededor de Facebook no es el ideal, pero niega que el ciclo de malas noticias relativas a la firma haya tenido nada que ver, tachándolo de "ridículo".
En cualquier caso, Zuckerberg parece comprometido de manera firme en desarrollar de manera definitiva todo lo relativo al metaverso y las múltiples realidades que con él pueden llegar. Será, eso sí, en varios años, apuntando a la "segunda mitada de la década" como momento en el cual comience a extenderse de forma evidente.