Apple da un paso más en su proyecto automovilístico. La compañía de Cupertino ha comenzado la primera fase de negociaciones con dos fabricantes de baterías: CATL y BYD. ¿El objetivo? Encontrar a un proveedor para su futuro coche eléctrico, el conocido como Apple Car.
Según informa Reuters, Apple ha puesto como condición construir instalaciones y fábricas de baterías en Estados Unidos. Coincide así con el nuevo plan de infraestructura de 1,7 billones de dólares propuesto por Joe Biden, presidente de EE.UU., de los que 174 mil millones de dólares estarán destinados a impulsar el mercado nacional de vehículos eléctricos.
Este requisito por parte de la firma de Cupertino podría torcer los planes de CATL, uno de los principales proveedores de baterías en coches eléctricos. Al parecer, CATL se muestra contrario a construir instalaciones en Estados Unidos para poder abastecer al Apple Car. Según fuentes del sector, por las tensiones políticas entre Estados Unidos y China, además de la preocupación por los elevados costes que supondría adentrarse en el mercado norteamericano.
En cambio, la noticia ha beneficiado a BYD. Sus acciones en Hong Kong han aumentado en hasta un 5,4% durante las últimas horas de la tarde. CATL comenzó con pérdidas iniciales, aunque cerró con una ligera subida del 0,5%.
El Apple Car, con baterías de litio-ferrofosfato
Al parecer, Apple estaría interesada en las baterías litio-ferrofosfato, las cuales utilizan utilizan materiales más económicos que el níquel y cobalto. Por el momento, ni Apple ni los fabricantes de baterías han confirmado las negociaciones en torno al Apple Car. Tampoco está claro si la compañía de Cupertino está manteniendo conversaciones con otros proveedores de baterías.
Por otro lado, la fuente menciona que la compañía también podría incluir su propia tecnología de baterías. Sin embargo, se desconoce hasta qué punto podrían influir CATL y BYD en los planes de diseño y tecnología de Apple. Se espera que primer vehículo eléctrico de Apple entre en producción durante el 2024.
