Ya está aquí el verano y con él la obsesión por el bronceado. Es así, nos ha tocado el siglo de la piel morena. Si hubiésemos mantenido las tendencias del siglo XVIII posiblemente huiríamos del Sol y grabaríamos vídeos de Tik Tok explicando la mejor forma de ponerse polvos por la cara para conseguir un aspecto más pálido. Como no es así, lo que se lleva en la red social son las publicaciones sobre ir a la playa sin crema solar o utilizarla estratégicamente para conseguir un contouring que nos dure lo mismo que el verano.
Bueno, afortunadamente no todas las publicaciones son así. Pero sí que hay ya algunas influencers que promocionan estos hábitos. Y con una sola que lo haga, si tiene muchos seguidores que la admiren y tomen como ejemplo, ya puede convertirse en algo muy peligroso.
Por eso, los dermatólogos se han lanzado a recordar los nocivos que pueden ser los efectos de las radiaciones solares si no tomamos medidas para evitarlo. El contouring puede gustarte más o menos; pero, por suerte, es maquillaje y se elimina fácilmente. Los daños que sufre nuestro ADN cuando nos quemamos no son reversibles. La quemadura visible se va pero las lesiones pueden volver muchos años después para recordarnos nuestro error de la más desagradable de las maneras.
Crema solar para un ‘contouring’ muy peligroso
El contouring es una técnica de maquillaje con la que se pretende modificar las facciones de la cara, iluminando aquellas que queremos que predominen y oscureciendo el resto. Así, por ejemplo, se puede marcar el mentón y obtener una faz más estilizada.
Algunas personas adoran esta técnica, otras la consideran demasiado artificial. Y lo cierto es que, si no se tiene un buen dominio del maquillaje, puede quedar poco natural. Pero el problema se elimina con un buen desmaquillante. La cara vuelve a convertirse en un lienzo en blanco y podemos volver a empezar, sin riesgo para nadie.
Lo que sí es un peligro es la propuesta de usar crema solar para realizar un contouring permanente. Lo que pretenden es proteger del sol solo las zonas que se quieren iluminar y dejar que el resto se queme para que el bronceado las oscurezca.
El resultado es que esas zonas desprotegidas quedan expuestas a las dañinas radiaciones UVA y UVB, que normalmente serían absorbidas por la crema solar. Y eso es un peligro. Lo han advertido varios dermatólogos en declaraciones a Cuidate Plus, mientras que otros lo han hecho a través de las redes sociales. Es peligroso a varios niveles. Lo más grave, por supuesto, es que puede producirse cáncer con el paso del tiempo. Las radiaciones solares dañan el ADN de las células de la piel. El efecto inmediato es la quemadura, pero con los años pueden generarse melanomas. Y esto es algo que puede ocurrir incluso varias décadas después. Además, si bien las personas que defienden esta peligrosa técnica lo hacen para sentirse más guapas, conseguirían el efecto contrario, ya que si no se usa protector solar, las arrugas aparecen mucho antes.
No es la primera vez
Las modas relacionadas con el Sol no son algo nuevo de este verano. Ni siquiera algo nuevo de Tik Tok. Ya en 2015 comenzaron a aparecer publicaciones sobre los tatuajes solares en otras redes sociales. Se trataba de una moda incipiente, consistente en exponerse al sol con una plantilla con dibujos colocada sobre la piel. Así, toda la piel quedaba quemada y el adorno en cuestión se veía más clarito. Como cuando nos queda la marca del bañador.
Por supuesto, para potenciar este efecto, se busca tumbarse a las horas de más sol y no usar ningún tipo de crema solar. El primero es un grave error; ya que, incluso si usamos protección, debemos evitar estas horas o, al menos, resguardarnos sin exponernos directamente.
Lo segundo es una equivocación, ya que existe la creencia de que para tener un buen bronceado no debemos usar protección. Pero eso no es así. La crema solar absorbe las radiaciones UVA y UVB para evitar que causen lesiones en el ADN, pero no impiden que nos pongamos morenos.
Por lo tanto, este verano busquemos un bronceado saludable con ayuda de la crema solar. Eso sí, no todo vale con ella. Debemos recordar consejos como usarla en todo el cuerpo, sin descuidar las orejas o los empeines de los pies, reaplicarla cada 2 horas y usar al menos un FPS de 30, o de 50 si es en la cara. Por último, si aún no has ido a la playa, tira el bote del año pasado. La crema solar no sirve de un año para otro. Y si tomaste mucho el sol y aún tienes el bote que te compraste a principios del verano de 2020, plantéate qué es lo que has estado haciendo mal. No le enseñes la crema a tu piel. Cúbrela con ella a conciencia.