Desde su estreno, WandaVision (Bruja Escarlata y Vision) planteó algunas preguntas sobre el Universo Cinematográfico de Marvel. ¿Qué ocurrió con los superhéroes más poderosos de la tierra una vez que la amenaza de Thanos cesó? Por lo visto, el final feliz duró muy poco. Tanto como para convertir la cuarta fase en un recorrido por un mundo completamente distinto.
Que tendrá, sin dudas, sus propias reglas. Lo mismo parece sugerir Falcon y el Soldado de Invierno, en la que el planteamiento de lo que ocurrió después del blip se amplía y no para bien. Si los espectadores esperaban un mundo post apocalíptico optimista, en Marvel acaban de dar un volantazo en dirección contraria.
Uno además que plantea que lo que sea que veamos en las nuevas películas y series será por completo nuevo a lo anterior. Y eso, sin duda, son buenas noticias. Después de más de diez años de películas y un arco argumental que cerró de manera impecable, la preocupación por el futuro de la factoría de superhéroes era grande.
¿Podría mantenerse la franquicia ese tono fresco para narrar nuevas historias? ¿Llegaría finalmente la anunciada y temida fatiga del género de superhéroes? Por ahora, todo parece indicar que Marvel ha sido mucho más astuto de lo que nadie suponía.
Érase una vez, un universo de superhéroes muy grande y colorido
Hace semanas, y a propósito del éxito del Snyder Cut de la Liga de la Justicia, Zack Snyder comentó a The New York Times que jamás haría una película de Marvel. ¿El motivo? “Son grandes historias de comedia con un corazón”, explicaba. Por supuesto pareció un halago a la fórmula de la franquicia, pero también era una crítica a su formato.
Mientras el Universo Expandido de DC está concentrado en su mirada pesimista sobre la realidad de los superhéroes, Marvel escogió al dirección opuesta. Sus películas están llenas de vida, chistes, color, humor y química. Todo esto teniendo en cuenta los graves enfrentamientos entre sus protagonistas, los duros sucesos que debían enfrentar y el concepto de la muerte sobrevolando cada escena. Pero, al final, Marvel está interesada en divertir.
La fase 4 de Marvel y el largo camino en busca de la supervivencia
Avengers: Endgame (Vengadores: Endgame) de los hermanos Russo fue todo un evento cinematográfico. Uno tan grande y colosal que hizo historia en el mundo del cine de superhéroes. Pero a la vez, marcó un punto y final de un fenómeno insuperable.
¿Habría una película que pudiera equipararse a algo semejante? Con el final de la fase 3 de Marvel, y a pesar de las buenas críticas de sus films de cierre, la pregunta fue inevitable.
El peligro no provenía del público, tampoco de la saturación de un tema reiterativo por necesidad. Mucho menos de las ganancias y las popularidad del género. Para Marvel, el peligro estaba en otra parte: el coronavirus. Por primera, tenían que enfrentarse a un año sin estrenos en cine como consecuencia del parón obligatorio.
La casa de las ideas tuvo que replantearse su fórmula. Hacerlo sobre la marcha y con varias películas ya en calendario que tuvieron que ser aplazadas. Viuda Negra dejó de ser la punta de lanza de la fase 4 de Marvel. Shang-Chi y la leyenda de los diez anillos se convirtió en una incógnita. Los Eternos, por su parte, sufría un atraso tras otro.
'WandaVision (Bruja Escarlata y Vision)', una bruja al rescate
Kevin Feige aclaró que aunque hubo cambios en el calendario de la productora para la fase cuatro de Marvel, no fueron tan grandes como cabría de suponer. No obstante, y a pesar de su optimismo, fue evidente que algo estaba ocurriendo en el estudio. Un movimiento discreto que obligó a tomar una serie de personajes secundarios y convertirlos en los nuevos protagonistas.
WandaVision (Bruja Escarlata y Visión) fue, por mucho tiempo, una propuesta experimental que formaba parte de la oferta de Disney Plus. Pero hubo indicios de que fuera el comienzo de la fase 4 de Marvel hasta finales del 2019. La decisión tomó por sorpresa a los fans. Eso a pesar de que Kevin Feige ya había anunciado que el personaje de Wanda Maximoff (Bruja Escarlata) tendría mayor importancia en la nueva fase.
De hecho, ya Feige había indicado que Wanda sería uno de los puntos centrales de la secuela directa del Doctor Strange. Pese a todo, hubo preguntas sin sobre cómo el personaje evolucionaría hasta ese punto. Y la respuesta fue una serie que pasaría a formar parte del recién nacido catálogo de Disney Plus. No obstante, la serie por entonces era un proyecto menor; una mirada fresca a un universo mayor.
Pero el 2020 hizo al estudio replantearse las cosas. WandaVision fue el primer gran paso de la fase 4 de Marvel. La serie asombró por su estructura, su capacidad para crear un universo propio y por mostrar la propuesta desde otra dimensión. De pronto, el universo carismático y optimista de Marvel tomó el mismo tono y ritmo de Infinity War y Endgame. El miedo y el pesimismo, el análisis de la muerte, el duelo y el dolor se hicieron presentes, sin que perdiera su poder para crear algo esencial.
WandaVision (Bruja Escarlata y Visión) es una historia trágica, pero también una de origen. Es una mirada al día después del blip, ese milagro que deshizo el chasquido de Thanos. No obstante, no se trató de un final feliz, sino del comienzo de un mundo nuevo y no precisamente mejor.
El aire luminoso de la fases anterior se volvió una escala de grises. Los dilemas morales cambiaron, e incluso la percepción sobre la identidad de los personajes se hizo por completo nueva.
Un escudo machado de sangre en la fase 4 de Marvel
Falcon y el Soldado de Invierno, segunda serie de Marvel de Disney Plus, introdujo la idea de la desaparición de los héroes. Mostraba el mundo después de Thanos y profundizaba en ello.
Los superhéroes de antaño dejaron de existir, de ser útiles o siquiera estar presentes. Los nuevos se preguntan su rol. Falcon y el Soldado de Invierno es la primera historia de Marvel en afrontar el dolor de los valores perdidos. De dialogar con el pesimismo y profundizar con cuidado en temas de enorme dureza.
La serie demuestra de forma brillante la evolución del mundo de Marvel y deja claro que quiere contar más cosas de ahora en adelante. Desde una bruja que puede ser villana y superheroína al mismo tiempo, hasta el escudo de Capitán América manchado de sangre. Todas las metáforas con las que jugó hasta ahora han caído, solo para crear otras nuevas. Y quizás, eso les ha haya salvado de un futuro desastre.