Elon Musk cumple su promesa y ha anunciado en su cuenta personal de Twitter que a partir de hoy será posible comprar un Tesla usando Bitcoin. Según ha explicado, desarrollaron un software propio y de código abierto con el cual realizarán las operaciones.

El ejecutivo, además, ha señalado que Tesla no convertirá los Bitcoin obtenidos por la venta de vehículos a otras divisas fiat convencionales. Estos ingresos permanecerán como criptomonedas en la cartera de la compañía.

Semanas atrás, en el reporte anual de ingresos y pérdidas que Tesla envió a la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC), explicaron que habían hecho una inversión de 1.500 millones de dólares para comprar Bitcoin. Lo hicieron con un porcentaje menor del flujo de caja disponible que —según explican en el reporte— no afectará la liquidez de la empresa para mantener sus operaciones. En aquel documento Tesla también adelantó que empezará a aceptar Bitcoin como moneda de pago de sus vehículos, aunque no especificaron una fecha de inicio.

Según Elon Musk, a partir de hoy se puede pagar con criptomonedas dentro de Estados Unidos. También será posible hacerlo en mercados internacionales en un futuro cercano. De momento la reserva del vehículo se sigue haciendo por medio de un depósito de 100 dólares en moneda fiat. En el procedimiento estándar de Tesla, el pago del vehículo se realiza pocos días antes de su entrega, que será el momento en el que el futuro propietario podrá elegir hacerlo en Bitcoin al tipo de cambio del día.

El anuncio de que ya se podrá comprar un Tesla con Bitcoin, y la compra, disparó el precio de la criptomoneda

El anuncio de la compra de los Bitcoin por medio de su reporte anual de ingresos y pérdidas enviado a la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC) disparó el valor del de la criptomoneda. Aquel día se incrementó en un 15% y se llegó a situar en lo que fue su máximo histórico de 44.000 dólares.

Su valor ha seguido aumentando, superando los 50.000 dólares pocos días después. El respaldo que significa que uno de los ejecutivos y emprendedores más exitosos mundo esté a favor de las criptomonedas ha sido determinante. Pero también ha despertado preocupaciones en los reguladores, puesto que un solo tweet de Elon Musk es capaz de afectar significativamente a un mercado que, de por sí, ya es bastante volátil.

Pese a que no se hizo público el precio de compra de la divisa virtual por parte de Tesla, analistas y expertos especulan que el fabricante de coches eléctricos podría haberse hecho de una cartera de entre 37.000 a 51.000 unidades.

Al momento de publicar este artículo, el tipo de cambio del Bitcoin se sitúa en los 55.600 dólares. El anuncio de que Tesla empieza a aceptar la criptomoneda como método de pago a partir de hoy, será un impulso importante para su valor.

Preocupación por las implicaciones medioambientales del Bitcoin

Elon Musk / Criptomonedas / Bitcoin

Tras darse a conocer que Tesla había hecho una importante inversión de 1.500 millónes de dólares para la compra de Bitcoin, se ha puesto sobre la mesa el impacto medioambiental detrás del proceso de minado de la criptomoneda. Actualmente, este representa más que el uso total de energía que Argentina consume en todo un año.

Se calcula que la moneda digital ya representa alrededor del 0,4 % del consumo mundial de energía. Además, con la revalorización del Bitcoin, su consumo energético ha crecido más de un 200% en los últimos dos años.

De acuerdo a un informe del Bank of America, llamado Bitcoin's Dirty Little Secrets, la compra de una de estas divisas virtuales representa una huella de carbono de 270 toneladas. Por lo tanto, la inversión de Tesla de 1.500 millones de dólares en la criptomoneda equivale a la contaminación emitida por 1.800.000 de coches de gasolina o diésel.

Considerando que la misión de Tesla es "acelerar la transición hacia el uso de energías limpias y renovables", la adopción de las criptomonedas, tal y como operan actualmente nivel tecnológico, no parece casar con sus principios y valores.

El problema de los Bitcoin es que su algoritmo incrementa la dificultad del proceso de minado –en el que se incluye el proceso de verificación de transferencias y generación de nuevas unidades– a medida que más personas se unen a la red distribuida.

Por lo tanto el uso energético no solo se incrementa por el número de equipos que minan criptomonedas, también por el aumento en la dificultad, inherente a la naturaleza misma de su funcionamiento .