Ming-Chi Kuo ha tenido un día bastante movido. Después de informar algunas novedades sobre los iPhone de 2021 y 2022, ahora el analista de TF International Securities aporta detalles sobre el tan rumoreado iPhone plegable (vía MacRumors). De acuerdo a su información, Apple podría lanzar este terminal durante 2023. Sin embargo, lo anterior depende de diversos factores relacionados con el desarrollo y producción de componentes que son clave para cualquier foldable.
Como seguramente sabes, desarrollar y fabricar un dispositivo con pantalla plegable implica un reto mayor respecto a los móviles convencionales. Según Kuo, para que el iPhone plegable vea la luz en 2023, Apple primero tendría que resolver algunos desafíos este mismo año. En primer lugar, concluir el desarrollo de tecnologías que son esenciales en su iPhone plegable. El analista deja entrever que todavía se encuentran en fase de investigación.
Por otra parte, Apple deberá superar los obstáculos actuales en la línea de producción. No solo es el hecho de enfrentar los daños que dejó la pandemia, sino también abordar la complejidad que representa fabricar componentes para un teléfono plegable. Principalmente la pantalla y el complejo sistema de bisagra. Al ser un sector que apenas está dando sus primeros pasos, producirlos en masa no es una tarea sencilla.
El tamaño del iPhone plegable
Kuo señala que el iPhone plegable llegaría con una pantalla de entre 7,5 y 8 pulgadas al estar abierto. A mediados de enero, Mark Gurman, periodista de Bloomberg y otra de las fuentes más confiables sobre futuros productos de Apple, dijo que la compañía estaba trabajando en varios prototipos de pantallas plegables. Una de ellas alcanzaba las 6,7 pulgadas —mismo tamaño del iPhone 12 Pro Max— cuando estaba abierta. La bisagra estaría oculta para darle protagonismo total al panel.
No obstante, Gurman igualmente mencionó que el iPhone plegable todavía está en fase de desarrollo. De acuerdo a su reporte, Apple aún no ha decidido si seguirá adelante con el proyecto hasta convertirlo en un producto comercial. Es decir, todavía existe el riesgo de que el teléfono ni siquiera se haga realidad. Gurman dejó claro que el dispositivo se haría esperar varios años en caso de recibir luz verde.