Un equipo legal de Facebook dijo a investigadores federales que estaban dispuestos a licenciarle su código a otras compañías para ayudarlas impulsar sus productos. Esta fue la estrategia de la compañía de Mark Zuckerberg para evitar las demandas por monopolio de más de 40 fiscales del país y de la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos.
De acuerdo a lo informado por The Washington Post, este ofrecimiento de Facebook fue presentado ante las autoridades como "el compromiso de la compañía con la competencia". Sin embargo, no fue suficiente y obtuvieron un duro revés. Los investigadores consideraron que la propuesta no abordaba plenamente su situación dominante en el mercado. Tras llegar a esa conclusión rechazaron la propuesta y las demandas siguieron su curso.
El código de Facebook es uno de los elementos más valiosos de la compañía. Con más de 2.400 millones de usuarios activos en todo el mundo, ha desarrollado una inmensa red de información. La empresa es, además, propietaria de Instagram y WhatsApp, redes sociales adquiridas en 2012 y 2014, respectivamente.
Algunas de las demandas acusan a Facebook de anular a la competencia. Es decir, cuando la mayoría de tus amigos y familiares son usuarios del amplio abanico de aplicaciones de esta compañía, se reducen la posibilidades de que deseen probar otras plataformas.
Facebook vs. el Gobierno de Estados Unidos
La situación de Facebook se ha complicado en las últimas semanas. En un intento por evitar que las demandas avancen, según señala The Washington Post, han contratado a ex abogados antimonopolio del Gobierno para desarrollar su estrategia de defensa. Los esfuerzos de la compañía ahora se centran en evitar multas millonarias y presiones de los reguladores de los Estados Unidos.
El resultado de estas demandas podrían marcar un precedente para toda la industria del Internet. No solo se podría limitar a Facebook a llevar a cabo prácticas anticompetitivas, sino también a otras compañías. Sin embargo, solo el tiempo dirá si la red social realmente tiene la intención de incentivar a la competencia sin caer en los controles del gobierno sobre las tecnológicas.