La vacuna de Moderna está cada vez más cerca de comercializarse. Este lunes, La compañía estadounidense ha pedido la autorización urgente para poder empezar a comercializar su vacuna contra la COVID-19. Lo ha hecho ante la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos y la Agencia Europea de Medicamentos (EMA).

Tanto Moderna como Pfizer son vacunas de ARNm. En Hipertextual ya explicamos cómo funcionan estas vacunas, pero con lo que hay que quedarse es con que la idea es aumentar la eficacia, de ahí sus altos porcentajes, mientras se evitan efectos secundarios.

Los datos iniciales, según la información aportada por Moderna, apuntan a un 94,5% de eficacia de la vacuna. No obstante, estos datos podrían variar una vez se vaya vacunando más gente. A pesar de los comunicados de prensa, no se han mostrado los resultados de los ensayos clínicos ni se han revisado por pares estas investigaciones. Sin embargo, para poder ser aprobados tanto por la FDA como por la EMA tendrán que aportar todos estos datos.

Carrera contrarreloj entre Moderna y Pfizer

No podemos afirmar que la de Moderna vaya a ser la primera vacuna contra la COVID-19, debido a que existe una carrera en la que, por ahora, va ganando la vacuna de Pfizer. Ya que esta presentó su solicitud la pasada semana. Aunque lo más probable es que se aprueben las dos más o menos a la vez. Siempre y cuando los ensayos clínicos sean correctos a los ojos de la FDA. La reunión esta prevista para el próximo 17 de diciembre.

Mientras que para la aprobación en Europa aún queda un poquito más. Esto se debe a que la EMA no prevé evaluar las vacunas más avanzadas hasta final de año, según recoge 20minutos. Por lo que es probable que tengamos que esperar un poco más para tener una vacuna que se pueda comercializar en la Unión Europea.