La aventura de Google en el mundo de los auriculares no ha sido especialmente exitosa. Los Pixel Buds de primera generación, presentados en 2017 como alternativa a los AirPods de Apple, no estaban a la altura de lo esperado. Sin embargo, los Pixel Buds de segunda generación, que aterrizan en España con un precio de 199 euros, son una historia completamente diferente.

Estos auriculares adoptan el formato true-wireless, dicen adiós al innecesario cable de la generación anterior y se enfocan en hacer bien prácticamente todos lo importante en un auricular inalámbrico moderno. Después, aderezan la creación con una pizca de inteligencia que le sienta especialmente bien.

Haciendo 'check' en todo lo importante

Google Pixel Buds

El estuche de carga se puede conectar a la red mediante USB-C, es compatible con cargadores inalámbricos (Qi) y, además, presenta una muy buena calidad de construcción. La bisagra es sólida, los imanes mantienen cerrada con firmeza la tapa y los auriculares encajan sin titubeos en cada hueco. En general, es un producto muy bien rematado, carente de holguras y bastante sólido. No tiene nada que ver con algunos auriculares inalámbricos económicos. Incluso detalles menores como la intensidad de los LEDs o el suave tacto de la caja están cuidados.

La caja es pequeña, a diferencia de otros auriculares equiparables. Esto resulta fundamental. Cuanto más pequeños, más fácil resulta echarlos en el bolsillo y, por consiguiente, utilizarlos en el día a día. La caja de los Pixel Buds, como referencia, tiene un tamaño similar a la de los AirPods Pro, aunque es ligeramente más grande que la de unos AirPods estándar.

El estuche tiene dos LEDs: uno indica el nivel de carga de los auriculares y el otro indica la carga del estuche. No obstante, cada vez que abres el estuche cerca del smartphone con el que está vinculado, emerge una notificación con los porcentajes de batería restante. También tienes una aplicación dedicada desde la cual puedes ver más detalles, así como ajustar diferentes parámetros relacionados con la reproducción, con Google Assistant, etc.

Los Pixel Buds son compatibles con Fast Pair, el sistema de Google que simplifica el proceso de emparejamiento entre auriculares y móviles. Al abrir la tapa del estuche por primera vez, aparecerá una notificación en el smartphone. Al hacer clic sobre ella, comienza el proceso de vinculación. No hace falta presionar botones ni ningún otro paso del estilo. Todo es automático e invisible al usuario. Una vez completado el proceso, los auriculares quedan asociados a la cuenta de Google, por lo que, al utilizar otro dispositivo compatible con Fast Pair, quedan vinculados al instante.

Los Pixel Buds de Google se mantienen firmes en la oreja incluso si haces deporte con ellos. Eso sí: es necesario escoger las almohadillas correctas para que se mantengan estables. En la caja se incluyen varios pares con diferentes tamaños.

Google Pixel Buds

La comodidad, por otra parte, es un aspecto subjetivo, pues depende de la forma que tenga la oreja de cada individuo. En mi caso particular, diría que los Pixel Buds son unos auriculares cómodos, aunque, en sesiones prolongadas, tanto los AirPods como los AirPods Pro me causaron menos cansancio. Se nota que Apple hizo mucho énfasis en la comodidad mientras diseñaba sus diferentes auriculares.

En lo que al sonido se refiere, los Pixel Buds ofrecen una buena calidad de audio. Esto no quiere decir que sean los auriculares con mejor sonido del sector, pero sí podríamos decir que cumplen sin problemas con su cometido. Eso sí: si eres una persona a la que le gustan unos bajos intensos –como ocurre con los Beats–, has de saber que los Buds de Google no destacan en ese aspecto. Sus bajos son más planos que en otros auriculares de su estilo. Y no, la aplicación complementaria no permite ajustar la ecualización de los auriculares.

Los Pixel Buds no cuentan con un sistema de cancelación de ruido como sí implementan los AirPods Pro o los Sony WF-1000XM3. Los tres sellan el pabellón auditivo mediante unas almohadillas, pero solo los auriculares de Apple y Sony filtran el ruido exterior mediante una serie de algoritmos y micrófonos. Esto no juega especialmente en contra de los Pixel Buds si se considera que son los más económicos de los tres. No obstante, su presencia habría sido agradecida. Y es que el aislamiento pasivo de los Pixel Buds, aunque reduce el nivel de ruido, no es ni mucho menos tan efectivo como los sistemas de cancelación activa de Sony y Apple.

En lo que respecta a autonomía, el comportamiento de los Pixel Buds es muy sólido. La marca promete unas 5 horas de uso y hasta 24 horas utilizando el estuche de recarga. Y, en términos generales, ese es el rendimiento aproximado que ofrecen en la práctica.

Para controlar la reproducción, los Pixel Buds permiten realizar gestos en la parte exterior. Toques, deslizamientos, etc. Todo funciona como cabe esperar.

Google Assistant, un factor diferencial

Google Pixel Buds

La parte más interesante de los Pixel Buds es, sin duda, la integración con Google Assistant. Los AirPods Pro también ofrecen esta posibilidad, pero Google Assistant es más capaz que Siri –al menos hasta iOS 13–. ¿Qué tengo en mi calendario esta tarde? ¿Cojo el paraguas? ¿Cómo va el partido de los Lakers? ¿Puedes apagar las luces de casa? Todo eso, y mucho más, está al alcance de unas pocas palabras.

También resulta interesante la función de volumen adaptativo. Este modifica el parámetro en función del ruido exterior. Si estamos en casa, en un entorno silencioso, es probable que ajustemos el volumen a un nivel más bajo que si estamos en el metro. Con esta funcionalidad, no es necesario modificar el volumen manualmente. Los auriculares lo hacen por sí solos.

¿Debería comprar los Pixel Buds?

Los Pixel Buds de Google son una propuesta muy interesante que destacan en el mismo aspecto en el que lo hacen los AirPods: la practicidad. Y esa fórmula, como Apple ha demostrado, puede convertirse en ganadora. Con cada vez más móviles diciendo adiós al puerto de auriculares, poner a disposición de los consumidores un producto que se configura sin dolores de cabeza, ofrece una buena experiencia de uso y, además, es fácil de transportar, resulta todo un acierto.

Esto no quiere decir que los Pixel Buds de Google sean los auriculares perfectos, ni mucho menos. Comparados con alternativas como los AirPods Pro o los WF-1000XM3, se pueden encontrar aspectos en los que Google aún puede dar un poco más de sí. Pese a ello, no obstante, estos auriculares de Google suponen un paso en la dirección correcta. Y para los usuarios de un smartphone Android que busquen un producto equilibrado, práctico e integrado en el ecosistema de Google, esta puede ser una de las mejores opciones.