“Microsoft estuvo en el lado equivocado de la historia cuando las iniciativas de codigo abierto explotaron a principios de siglo”. Esa sencilla pero contundente afirmación corresponde a Brad Smith, actual presidente de Microsoft. El ejecutivo norteamericano pronunció esas palabras durante un evento organizado por el prestigioso Instituto Tecnológico de Massachussets (MIT).
“La buena noticia es que, si la vida es lo suficientemente larga, puedes aprender que necesitas cambiar”, expresó Smith. “Hoy, Microsoft es la empresa que más contribuye a proyectos open source en el mundo. Cuando miramos hacia GitHub, lo vemos como el hogar del desarrollo open source, y vemos nuestra responsabilidad como su administrador para hacer de él un lugar seguro y productivo para los desarrolladores”.
Las declaraciones de Brad Smith contrastan con las palabras que otros directivos de la compañía pronunciaron en el pasado. Entre las más destacadas se encuentran las de Steve Ballmer, director ejecutivo (CEO) de Microsoft hasta el año 2014. Este llegó a decir públicamente que “Linux es un cáncer”.
Satya Nadella cambió Microsoft
Bajo el timón de Satya Nadella (actual director ejecutivo de Microsoft), los de Redmond han tendido la mano a la comunidad open source de diversas formas. Entre los movimientos más destacados se encuentran la compra de GitHub en 2018, la alianza con Canonical para llevar Ubuntu a Windows 10, la implementación del motor Chromium en el navegador web Edge y el desarrollo un sistema operativo para el internet de las cosas (IoT) basado en Linux.
Microsoft, además, es miembro platino de la Linux Foundation. Comparte esta posición con otras grandes corporaciones del sector como Google, IBM, Intel, Huawei, Samsung, Qualcomm, Cisco o Tencent.
En la actualidad, el valor de las acciones de Microsoft se encuentra en máximos históricos. La reestructuración llevada a cabo por Satya Nadella ha dotado de fortaleza a la compañía, cuya capitalización bursátil supera holgadamente el billón de dólares en un momento en el que todos los mercados se tambalean debido a la pandemia del coronavirus.