El director oriundo de, Belfast Mark Cousins, se toma el cine muy en serio. Tanto como para crear y construir un recorrido inolvidable a través de sus secretos en uno de los documentales más extraños filmados sobre el tema. The Story of Film: An Odyssey, con sus quince capítulos de una hora de duración, es un homenaje al universo cinematográfico en todas sus formas, y también a todos quienes trabajan en él en un recorrido asombroso que muestra la evolución del cine como forma de arte. La obra de Cousins de inmediato se transformó en una referencia sobre cómo aprender sobre el cine desde un discurso ordenado e intuitivo, a la vez que puede abarcar cada espacio artístico que sostiene su lenguaje.

En una nueva versión de su experiencia, el director ha decidido crear una en formato reducido con la cual pretende repetir la experiencia, pero durante las especialísimas condiciones que ha provocado la emergencia sanitaria del coronavirus: “Cuando tenemos a nuestro alcance el cine no estamos completamente solos”, comienza Cousins para abrir las puertas de una experiencia visual que ha incluido de forma gratuita en su canal de VIMEO. 40 Days to Learn Film (40 días para aprender cine) es el nuevo intento del documentalista para crear y sostener una idea más profunda sobre lo cinematográfico, pero además brindar una mano solidaria a todos los cinéfilos que deben permanecer en cuarentena preventiva debido a la emergencia sanitaria del coronavirus.

De la misma que su trabajo más conocido, Cousins muestra en cuarenta lecciones con un recorrido pormenorizado por la historia del cine actual, y también una versión sobre la industria que incluya una mirada profunda a su manera de crear. También para sostener un concepto visualmente atractivo sobre nuestra época y además reflexionar sobre la identidad del cine en medio de una situación tan complicada como la que viven buena parte de los países de Europa y America.

El director, consciente del poder del cine como testigo del mundo que intenta reflejar, tomó la decisión de crear una improvisada escuela de cine, que sacando provecho de las limitaciones de la cuarentena permita explorar las dimensiones desconocidos del lenguaje cinematográfico y llevarlo a un estrato por completo nuevo.

El ABC del mundo en celuloide

“¿Cómo usamos este tiempo en casa? ¿Y si imaginamos una escuela de cine? ¿Uno que dure 40 días?” “¿Qué podríamos aprender sobre el cine si pudiéramos analizar cada mecanismo que lo hace funcionar?”. Bajo estas premisas, el director comienza su especial serie, que además funciona como un trayecto pormenorizado a través de la historia del cine y sus repercusiones en todos los campos artísticos.

El contenido de 40 Days to Learn Film tiene la intención de repasar conceptos básicos como el estilo, las ideas, las emociones, cuestiones prácticas e incluso anécdotas desconocidas del cine como experiencia global, además de permitir al espectador aprender de su mano hasta que punto el cine tiene la capacidad de englobar diferentes lenguajes artísticos bajo una concepción plural de la capacidad de narrar historias que une a todos los países, realizadores y aspectos del cine bajo una mismo cariz

La serie entera es una celebración del mundo cinematográfico. Cousins utiliza ejemplos de sus películas y documentales favoritos para narrar y reflexionar sobre lo que puede enseñarnos cada film sobre la historia y la forma en que la industria detrás y delante de cámara traduce lo contemporáneo en símbolos reconocibles y colectivos.

El primer capítulo de estas extraordinarias lecciones analiza la teoría del color a través de Siddhershawari Devi, de Mani Kaul, el célebre director de cine de Bollywood que utilizó y experimento con la paleta de tonos e iluminación dentro de las extravagantes escenas de sus películas. Todo hasta lograr crear un estilo único que resume la capacidad de las dimensiones y la riqueza de los tonos cinematográficos para sostener discursos elaborados en la pantalla grande.

Luego hace un recorrido por el San Francisco simétrico, pulido y frío imaginado por Alfred Hitchcock en Vértigo para explicar la manera en que la luz puede construir una forma de entender la tensión emocional de las secuencias en la narración visual. Por último, Cousins hace un recorrido por el universo inquietante de 3 Rooms of Melancholia, de Pirjo Honkasalo, que las duras imágenes de su argumento para cuestionar la forma en que comprendemos la infancia, la soledad y el miedo. Cousins aprovecha el denso documental de Honkasalo para demostrar la efectividad del uso de la edición para crear una atmósfera tensa y profundamente elaborada que crea inevitables conexiones emocionales con el espectador.

40 libros recomendados para aprender de cine durante la cuarentena

A medida que las lecciones transcurren, Cousins se esfuerza por detallar con cuidado todo lo que hace al cine un vehículo monumental de metáforas sobre la identidad contemporánea. El realizador dedica en cada capítulo especial interés en describir la forma como los diferentes cineastas, guiones, directores de fotografía y cinematografía exploran con firmeza los límites sobre lo que asumimos como parte de la manera en que concebimos la realidad y sus formas de expresarse: desde el eje argumental —en el cual Cousins hace énfasis en el segundo episodio a través de cine asiático—, hasta el motivo por el cual las películas de boda tienen un especial éxito, los usos del foco para potenciar la tensión, los motivos obsesivos, lo sublime, los finales, la tensión o la música. En definitiva, Cousins abarca todo lo imaginable en el mundo del cine utilizando todo tipo de films como forma de diálogo visual.

El recorrido incluye a películas como Dreamcatcher (Kim Longinotto), The Fog of War (Errol Morris), Cuentos de Tokio (Yazujiro Ozu), Cuatro bodas y un funeral (Mike Newell) La boda de mi mejor amiga (Paul Feig), Madre e hijo (Aleksandr Sokurov), Mad Max: Fury Road (George Miller), Los espigadores y la espigadora (Agnès Varda), The Wind (Victor Sjostrom), Hojas caídas (Alice Guy-Blaché) e inclusive, rarezas del cine de género como El exorcista (William Friedkin), Minamata: The Victims and their World (Noriaki Tsuchimoto), Joker (Todd Phillips) o Wednesday (Viktor Kossakovsky).

Al final las lecciones celebran lo cinematográfico de una manera por completo nueva, inteligente y potente.